Este fin de semana el jugador del Sparta Praga, Jakub Jankto, se declaró homosexual en un emotivo video que subió a sus redes sociales, recibiendo apoyo de gran parte del mundo del fútbol.
Dos días después su ex pareja, Markéta Ottomanská, con quien tiene un hijo de tres años, salió a dar su testimonio respecto de la relación que tiene con el futbolista checo.
“Estoy orgullosa de que haya podido reunir la fuerza para salir a la luz públicamente. Es el primer futbolista que lo anuncia. Quizás solo lo admitieron aquellos que terminaron sus carreras. Todos los demás lo mantienen en secreto”, señaló en el medio IDNES de República Checa.
Luego, lamentó: “Seguro que todavía hay muchos que le escriben mensajes privados y lo amenazan. Es terrible que algo así siga ocurriendo en estos días. Personas extrañas interesadas en la vida de otras personas”.
Sobre el momento en que se enteró que su ex pareja era homosexual, indicó: “No quiero publicar tales detalles. Pero cuando me dijo eso, también me dio mucha libertad. Ahora lo importante es que esté cómodo y feliz. Seguramente se sentirá aliviado y nada se lo comerá por dentro. Tenía miedo de que la gente no lo aceptara por lo que era. Estaba estresado por eso. Creo que a la gente le gustará tanto como antes. Solo necesita ser amable con ellos”.
Sobre su ruptura, indicó: “Está en el pasado, ya no me ocupo de eso. No lo culpo. Lo que estaba pasando también se debía a que yo tenía un trauma no resuelto de mi niñez, el divorcio de mis padres. Hablé de eso el año pasado porque necesitaba cerrarlo para mí. Ahora operamos sobre una base neutral: somos padres, así que tenemos que llevarnos bien”.
Jankto había señalado en su publicación: “Como todos los demás, tengo mis fortalezas, tengo mis debilidades, tengo una familia, tengo a mis amigos, tengo un trabajo que lo he estado haciendo lo mejor que puedo durante años, con seriedad, profesionalismo y pasión”.
“Como todos los demás. Yo también quiero vivir mi vida en libertad. Sin miedos. Sin prejuicios. Sin violencia. PERO con amor”, agregaba.