Atlético de Madrid mostró sus credenciales de favorito para La Liga de España al imponerse 2-1 ante Espanyol en un sufrido partido marcado por el reestreno de Antoine Griezmann tras un par de temporadas de Barcelona, pero en el terreno de juego estuvo lejos de ser placentero para el delantero francés.

De hecho, los catalanes estuvieron lejos de achicarse y en el primer tiempo encontraron la manera de imponer condiciones y unos cinco minutos antes del descanso tomaron ventaja de forma justa cuando Raúl de Tomás la mandó a guardar con un precioso cabezazo tras cobro de tiro de esquina.

Para la segunda mitad, los colchoneros se vieron forzados a adelantar líneas y Diego Simeone realizó cambios, siendo el francés uno de los sacrificados. A los 54', Thomas Lemar había logrado igualar pero por un fuera de juego previo por parte de Luis Suárez la anotación fue anulada tras revisión del VAR.

De igual forma, quedaba mucho partido. Al minuto 79' la igualdad llegó gracias a Yannick Ferreira Carrasco al luchar la pelota dentro del área para al menos hacer que los rojiblancos se llevaran un importante punto de su visita al equipo de Barcelona.

El partido enloqueció por completo al final cuando el cuerpo arbitral dio 10 de añadido, algo que fue protestado por todos los hinchas locales, y justo en el último suspiro llegó la definitiva anotación gracias a Lemar con un fuerte zapatazo que no pudo detener Diego López y que terminó en el fondo de la red.