Este miércoles el Palmeiras se clasificó a las semifinales de la Copa Libertadores de forma heróica, tras empatar sin goles con nueve jugadores y luego imponerse en la definición a penales frente al Atlético Mineiro.

El bicampeón del torneo continental definió su paso a la ronda de los cuatro mejores ante su público en el Allianz Parque de Sao Paulo y tras el sexto penal ejecutado por Murilo.

Eso sí, su técnico, Abel Ferreira, no estuvo presente durante los lanzamientos, pues se fue a esconder a los camarines, donde ni siquiera escuchó a los hinchas, pues se puso audífonos.

"Me preguntaron si no vi los penales... estaba abajo, escuchando mi música. Le dije a Dios que agradecería el resultado y la forma", reveló el entrenador portugués.

"Dije que no quería presionaro, pero que teníamos que ganar", bromeó el exitoso técnico del Verdao, quien ya ganó dos títulos de Copa Libertadores.

Luego, elogió a sus jugadores: "En el lado mental, este equipo cree. Viene de sus madres y padres, es fruto de los padres y madres de estos jugadores, que deben estar orgullosos de lo que hacen. (...) Mi cuota de responsabilidad es 30 centavos, lo he dicho varias veces".

"El resto son ellos. Yo no corrí, no me desgasté, me quedé callado, lucharon hasta el final, fueron al fondo del espíritu colectivo. y capacidades”, añadió.

Finalmente, sobre uno de sus métodos, comentó: “A veces los jugadores deben reírse cuando les digo que cierren los ojos e imaginen lo que pasa en el partido. Y lo mismo hago con mi cuerpo técnico. Creo un escenario y cuando pasa, estamos preparados para responder. Tenemos a André, Rogério, Carlos Martinho, Castanheira, Tiago. Tenemos cerebro para pensar bien".