Este martes el Deportivo Táchira de Venezuela logró una valiosa victoria por 2-1 como visita frente al Independiente Petrolero en el Grupo A de la Copa Libertadores.
El primer gol del partido dio la vuelta al mundo por lo inusual, pero también los errores de la defensa local que propiciaron la apertura del marcador.
A los 44 minutos el portero visitante Cristopher Varela sacó desde su arco un balón largo que dio el primer bote en la entrada del área grande sin que nadie logre conectarla.
En el segundo bote, que cayó en el área, saltó un delantero, el defensa y el mismo guardameta, pero nuevamente nadie pudo agarrarla.
El tercer bote fue en el área chica, cuando ya había superado a todos los jugadores, y justo cuando iba a entrar la pelota al arco, el jugador Anthony Uribe empujó el balón.
No le dieron el gol al portero Varela, aunque por milímetros pudo ser suyo, lo que hizo recordar aquel golazo que convirtió Nicolás Peric defendiendo a la Universidad de Concepción frente al Bolívar por la Copa Sudamericana 2004.
Segundos después de este gol, el Independiente Petrolero anotaría a través del veterano Jhasmani Campos para irse al descanso en igualdad. Pero todo lo definiría el recién ingresado Simisterra a los 65 minutos.
De esta forma, el Táchira suma cuatro unidades en tres partidos y es momentáneamente segundo en el Grupo A de la Copa Libertadores, tras el líder Palmeiras que tiene seis en dos encuentro jugados.
