La tormentosa temporada del Barcelona sufrió un nuevo golpe al quedar eliminado en la Copa del Rey a manos del Athletic Club que se impuso 3-2, llevándose un partido en la prórroga con bastante justicia a pesar que en los 90 minutos no pudieron abrochar el resultado para darle mucha emoción a lo sucedido en San Mamés.

Las acciones comenzaron bastante favorables para los vascos, que abrieron el marcador apenas al segundo minuto del pitazo inicial abrieron la cuenta gracias una joya de anotación por parte de Iker Muniain con un bonito derechazo cruzado totalmente imposible para Marc-Andre ter Stegen.

Sin embargo, los culés supieron sobreponerse a ese primer golpe recibido y apareció el fichaje estelar Ferran Torres con un gol bastante similar al que abrió la cuenta del compromiso. Disparo con su pierna diestra que fue directamente al ángulo y que entusiasmaba a los dirigidos por Xavi Hernández.

Barcelona sigue padeciendo una temporada que se le hace eterna. (Foto: Getty Images)

Barcelona sigue padeciendo una temporada que se le hace eterna. (Foto: Getty Images)

Cuando la prórroga parecía inminente, una pelota quieta que no pudo ser despejada por Gerard Piqué permitió que Íñigo Martínez pusiera en ventaja a los Leones al 86' y prendiendo la celebración de los locales, que sufrieron un duro golpe al 90+3' con Pedri igualando con un zurdazo tras una habilitación de chilena de Dani Alves para forzar alargue.

Las cosas se complicaron para Barcelona con nuevas molestias físicas de Pedri y Ansu Fati en la primera parte de la prórroga que se cerró con un penal a favor de Athletic por mano de Jordi Alba que Muniain cambió por gol. Los blaugranas lo intentaron pero se le hizo imposible y sumaron otra decepción en una temporada que se le hace eterna.