Con motivo de la conmemoración del Día Nacional del Emprendimiento que será este sábado 29 de abril, conversamos con la vicepresidenta de Chile Converge, una corporación sin fines de lucro que apoya a MiPymes y entrega herramientas y servicios para que puedan desarrollarse. Gabriela Salvador destacó el rol de los emprendedores en la economía chilena.

"La mayoría de los emprendimientos nacen por necesidad, es decir, de personas que estando sin un trabajo formal buscan cómo subsistir y lo hacen por medio de estos emprendimientos. Si bien estos no realizan un aporte significativo al PIB , generan empleos en el territorio y su entorno: en Chile más del 65 % de las personas trabaja en una MiPyme", comentó Gabriela.

En esa misma línea, Salvador se refirió a cuál es el principal atributo o característica que diferencia a los emprendedores chilenos de los demás: "Las principales características para mí son resiliencia y tenacidad.  En Chile somos un país que por nuestra naturaleza sísmica sabe enfrentar catástrofes, del mismo modo lo hicimos con la pandemia. Algo impensado en que los chilenos siempre nos volvemos a parar". 

¿Cuál es el principal desafío que tienen las MiPymes en este 2023 y cómo proyecta la evolución del emprendimiento en los próximos 10 años?

Actualmente, el principal desafío es el financiamiento, que el ecosistema genere o conecte con quienes pueden entregar ese apoyo. Esto principalmente porque el sistema bancario en general exige a las MiPymes tener años de actividad y utilidades para entregar créditos y préstamos.

Dada la evolución que ha tenido este año la economía, ¿cómo proyecta el segundo semestre para los emprendedores? Bajo su conocimiento y experiencia, ¿qué recomendaciones daría?

Estamos en un período de mucha incertidumbre, esto implica que se frenan las inversiones y la economía, al ser una cadena hace que todos estemos conectados, por lo que nos impactará de diferente manera. Al afectar la inversión país, generará restricciones de gasto e inversión. Junto con ello se suma la inflación. Es por esto que recomiendo que se emprenda en un sector de la industria donde el alza de costos sí se pueda transferir en precio a los clientes.

En este contexto económico, ¿qué tipo de emprendimientos, o en qué áreas, pueden tener mejores resultados, y en cuáles no?

Como la innovación es más compleja en empresas grandes, los emprendedores pueden llevar, crear innovación y vender sus productos, plataformas o servicios a empresas más rígidas. Hay  productos o servicios anti cíclicos, por ejemplo, los relacionados al adulto mayor,  como la población de Chile se va envejeciendo, todo lo vinculado a este segmento tiene un mejor proceso de precios, dado que son inelásticos, es decir, se sigue demandando sin que le afecte el cambio de precio.

También están los temas de tecnología, en que los emprendedores generen propuestas de valor que impacten en inmediatez y ahorro de tiempo para los usuarios. Dada la inflación, no recomiendo sectores que no puedan traspasar el costo a los clientes, esto hará que disminuyan las utilidades o aumenten las pérdidas.

¿Cree que es un buen momento para que los emprendedores adquieran deudas para expandir sus negocios?

Creo que el financiamiento es el primer freno al emprendimiento, por ende si en el plan de un negocio existe alguien que lo financie puede ser que cruce lo que se denomina el  “valle de la muerte“, donde muchos fracasan. Creo que las tasas están altas, sin embargo si logran generar un mejor producto que el retorno implique poder hacer frente al déficit, es bueno endeudarse. Otro financiamiento que es más sano es el factoring, que para muchos es lejano.

¿Cuáles son, a tu juicio, los mayores errores que cometen los emprendedores y de qué forma se pueden evitar?

El mayor error es enamorarse de una solución a un problema porque muchas veces implica crear algo inviable y se fracasa. Al emprender se  debe estar abierto a cambiar la propuesta de valor, hasta que se tenga una que calce perfecto con la demanda.