El 23 de enero de 2002 el pueblo albo recibió la peor noticia su historia: Colo Colo fue decretado en quiebra. Las malas gestiones de los dirigentes llevaron al equipo más popular del país a dicha instancia, con hasta ex jugadores como acreedores del club.

Institucionalmente aquel es el peor momento del cuadro de Macul, porque deportivamente no lo es, ya que ese año terminó con el Cacique dando una vuelta olímpica en el estadio Nacional, tras superar en la final del Torneo de Clausura a Universidad Católica, de la mano de Marcelo Espina, con un puñado de jugadores jóvenes.

Aquella situación económica desencadenó la consiguiente creación de la sociedad anónima Blanco y Negro, empresa anexa que administra a Colo Colo, y la cual, en 2020 le “regaló” el peor año deportivo al cuadro que hace de local en el estadio Monumental.

Lo de los blancos en 2020 ha sido patético. Armaron un plantel para luchar arriba y están abajo, porque a falta de 10 fechas para el final del Campeonato Nacional, son colistas, siendo el máximo candidato a descender a Primera B, situación que jamás le ha tocado vivir al conjunto más ganador del país.

Pésimo arranque y chao Salas

Colo Colo venía en picada desde mediados de 2019, y debido a la suspensión del torneo el año pasado por el estallido social, alcanzó a quedar en el segundo lugar de la tabla, tras el campeón Universidad Católica.

Con Mario Salas en la banca empezó el 2020, con un entrenador que no supo armar un plantel balanceado, lo cual se notó de inmediato en el arranque del torneo.

Una victoria y cuatro derrotas al hilo le costaron el puesto al Comandante, quien pese a lo mal que jugaba su equipo, insistía en seguir en el cargo. Tras caer ante Curicó Unido en La Granja, se acabó el paso del ex rugbista por el Monumental.

“No tengo en la mente, ni me proyecto, con la idea de renunciar. Voy a seguir luchando, estoy firme, siento que tengo las herramientas para darlo vuelta y tengo a los jugadores también. Tengo mucha energía para seguir yendo adelante”, dijo Salas aquel 24 de febrero, pero finalmente al otro día fue despedido.

Salas

Mario Salas dirigió por última vez a Colo Colo en Curicó – AgenciaUno

El papelón de Scolari

Tras el despido de Salas, ByN se puso a buscar entrenador. Pese a que el encargado de aquella misión era el renunciado gerente deportivo Marcelo Espina, tomó las riendas del asunto el vicepresidente Harold Mayne-Nicholls, quien protagonizó un gigantesco papelón.

El ex presidente de la ANFP inició las gestiones para contratar como DT al campeón del mundo con Brasil Luiz Felipe Scolari, lo que llenó de alegría al presidente Aníbal Mosa, sin embargo, la historia no tuvo un final feliz.

Mosa, Mayne-Nicholls y Espina viajaron a Brasil con el contrato en la mano, y un lápiz, esperando que el veterano estratega firmara un histórico vínculo con Colo Colo. Pese a los esfuerzos, nada de aquello movió al gaúcho, que finalmente le cerró la puerta en la cara a los dirigentes albos, que tuvieron que conformarse con dejar a Gualberto Jara como interino.

En primera instancia el paraguayo fue confirmado como el técnico del primer equipo hasta final de año, pero los paupérrimos resultados hicieron que ByN, otra vez, borrara con el codo sus decisiones, lo sacaron del cargo y terminaron contratando a Gustavo Quinteros.

Seguro de cesantía

La pandemia del coronavirus afectó a todo el mundo, de aquello no hay dudas, y el fútbol también se vio perjudicado, por la suspensión de todas las actividades, lo que pegó directamente a Blanco y Negro.

Muchos equipos en Chile y en el extranjero decidieron bajar los sueldos de sus funcionarios, incluidos los futbolistas, y en Colo Colo intentaron hacer lo propio, sin embargo, jamás llegaron a un acuerdo entre los dirigentes y los atletas.

Tan lejos llegó la disputa, que luego de mediaciones en la Dirección del Trabajo, la sociedad anónima decidió mandar a los jugadores a cobrar su sueldo al seguro de cesantía, lo que generó un profundo quiebre.

Esta situación provocó que el plantel de Colo Colo estuviera un largo tiempo sin entrenar, ni siquiera de manera remota, como lo hacían el resto de los equipos chilenos, lo que al regreso del fútbol quedó graficado en el rendimiento, ya que todos los cuadros le pasaron por encima a la tienda de Macul.

Paredes

Paredes e Insaurralde en la Dirección del Trabajo – AgenciaUno

Fracaso en la Libertadores

Si los resultados a nivel local fueron malos, obviamente en el plano internacional no iban a ser mejores, pese a que Colo Colo llegó con chances de avanzar en la Copa Libertadores hasta la última fecha.

En el último partido de la fase grupal se medía con los bolivianos de Jorge Wilstermann. Una victoria los podía depositar en octavos de final, o en el peor de los casos, en la Copa Sudamericana.

Pero nada de ello ocurrió, y el elenco visitante, que vino a refugiarse al Monumental, en la única llegada que tuvo en todo el partido, marcó el 1-0 en el final y dejó al equipo que ya dirigía Gustavo Quinteros en el último puesto, con las manos vacías. Reflejo absoluto de un año para el olvido.

Sin camiseta

Problemas de todo tipo ha tenido Blanco y Negro para administrar a Colo Colo en 2020, y uno de ellos tuvo relación con la marca deportiva que viste al club, Umbro.

“Actualmente se encuentran incumplidas, por Comercial Depor (distribuidor exclusivo de la marca Umbro para Chile), diversas obligaciones establecidas en el contrato. Por lo mismo, las partes buscaron mecanismos que permitieran regularizar los pagos que Umbro adeuda a Blanco y Negro. Pese a lo avanzado de estas conversaciones, Umbro, intempestivamente, abandonó la negociación”, contó la sociedad anónima en un comunicado, explicando que rompían el vínculo con la empresa inglesa.

De esta manera, Colo Colo tenía que buscar un nuevo sponsor, ya que el acuerdo que tenía con Umbro hasta el 31 de diciembre de 2023 quedó truncado, y acaba precisamente el último día de 2020.

Mosa se movió rápido y encontró al reemplazante, adidas, que vuelve a Colo Colo y tendrá su estreno este sábado, en el partido ante Deportes Antofagasta.

Mosa

Aníbal Mosa y Harold Mayne-Nicholls son apuntados por su gestión – AgenciaUno

El drama del descenso

Todo lo antes mencionado es pésimo, pero lo que le ha pasado en la cancha a Colo Colo es funesto, porque está en el último puesto en al tabla, y si no levanta el rumbo en los 10 partidos que quedan, se va a la B.

El Cacique jugó 24 encuentros hasta la fecha, ganó apenas cinco, empató siete y perdió 12. Anotó 25 goles y le hicieron 36. Es por lejos el peor equipo del Campeonato Nacional, a cuatro unidades de Coquimbo Unido (tiene un partido más), lo que lo está condendando al descenso.

colo colo

Esteban Paredes ha sufrido muchas lesiones en el año – AgenciaUno

Colo Colo ha tenido muchos problemas deportivos a lo largo del año, y ahora los está sufriendo el entrenador Gustavo Quinteros, que no ha podido tener nunca a todo su plantel a disposición, porque las lesiones le han pasado la cuenta a un equipo que durante la pandemia no se preparó físicamente para el alto rendimiento.

El 2020 se va, el peor año deportivo de Colo Colo ya es historia, y empieza el 2021 con la misión de salvarse del descenso, pero esa será otra historia…