Arturo Vidal volvió a Sudamérica con un sueño: ganar la Copa Libertadores. Para eso se puso la camiseta de Flamengo, uno de los equipos más poderosos que quedan con vida en el torneo continental y donde este martes chocará ante Corinthians, en la ida de los cuartos de final.

El encuentro que se jugará desde las 20.30 horas en Sao Paulo marcará el regreso del King al torneo continental de clubes más importantes de nuestro continente. Campeonato que solamente tuvo el placer de jugar en una ocasión.

Fue el 2007, cuando defendió la camiseta de Colo Colo en el elenco de Claudio Borghi. Jugando como stopper en una línea de tres defensores o incluso como carrilero por izquierda, clasificó a octavos de final luego de triunfos antes Caracas y la Liga de Quito, lo que le alcanzó para meterse en octavos de final.

En esa instancia le tocó el duro cuadro de América de México. La ida, jugada en el DF, prácticamente sepultó las aspiraciones del Popular. Fue goleada 3-0 de las Águilas, lo que dejaba cuesta arriba el paso a cuartos de final.

En un Monumental con más de 20 mil espectadores, el 8 de mayo de 2007 el Rey jugó su último encuentro por la Libertadores. Los albos ganaron 2-1 pero no alcanzó para avanzar de ronda. Días después, a fines de ese mes, Vidal sería vendido a Bayer Leverkusen.

Habrán pasado 5.565 días para Vidal vuelva al torneo continental más lindo del mundo. Será con el Fla, donde sueña consagrarse campeón y así sacudirse la mufa no haber levantado nunca la Champions League, a pesar de haber jugado una final con la Juventus y varias semis en el certamen europeo.