La ANFP no ha podido escapar de un síntoma que se viene repitiendo en los últimos años: que las competencias del fútbol chileno se terminen resolviendo en el escritorio o, como se dice, “por secretaría”, por las irregularidades que se generan en la competencia.
El último damnificado es San Marcos de Arica, luego de que las dos salas del Tribunal de Disciplina decidieran castigar con una millonaria multa y resta de puntos la alineación antirreglamentaria de un jugador que no había sido inscrito correctamente.
La anomalía decretó el descenso directo de los Bravos a Segunda División y la salvación de Barnechea, colista absoluto de Primera B. Pero en el norte no se quedarán de brazos cruzados y anuncian que el pataleo llegará a los más altos confines de la justicia.
Así lo señala el tesorero del cuadro ariqueño, Héctor Riveros, en diálogo con La Red Deportes. “Vamos a agotar todas las instancias y entre ellas están los tribunales de justicia, el TAS (Tribunal de Arbitraje Deportivo) yla FIFA. Y no descartamos la intervención de la ANFP por parte del Ministerio de Justicia”, amenaza.
Según el directivo. “nuestros argumentos se resumen en el desorden que existe en la ANFP, no solamente con nosotros (en Primera B), sino que también en Primera División y Segunda División. Porque también va para allá la denuncia que harán contra Deportes Melipilla. Y Melipilla también terminará en tribunales ordinarios”, adelanta Riveros.
Para el representante de los Bravos, el problema de la ANFP radica en que ya no se trata de casos excepcionales: “Si hubiera sido solamente un error de San Marcos, lo aceptamos. Pero hubo errores en Primera División, en Primera B y en Segunda División,Entonces se nota que hay un error administrativo”.
Y apunta sus dardos contra el directorio de transición que encabeza Pablo Milad. “Desde el punto de vista formal, la dirigencia se ha dedicado mucho al tema externo, pero el tema interno, que también es importante administrar y dirigir, no ha sido bueno”.
De esta manera, habrá que esperar para sentenciar la lucha por la permanencia en todas las divisiones del fútbol chileno, especialmente en lo que concierne a Primera División, ya que un castigo contra Melipilla puede garantizar la permanencia de equipos como Huachipato, Universidad de Chile, Cobresal y Curicó Unido en la categoría.
“Club chico, pero con una gran ciudad de respaldo”
En lo particular, San Marcos de Arica espera demostrar que la alineación indebida de Zederick Vega y los problemas con su inscripción son responsabilidad de la ANFP, lo que le permitiría recuperar su lugar en el torneo de ascenso.
“Lo que vamos a pedir es la condonación de las multas y la restitución de los puntos. Hay un daño patrimonial a la sociedad y los accionistas desde el punto de vista económico, por todos los gastos que se hacen en el año, por traslados, alojamientos y remodelaciones”, explica el tesorero nortino, Héctor Riveros.
“Y sobre todo a la ciudad de Arica, porque acá no están dañando solamente a un club profesional, si no que le hacen daño a una ciudad grande, a toda la hinchada. Aunque nos vean como un club chico, tenemos una gran ciudad de respaldo”, sentencia el directivo.
Cabe consignar que además de San Marcos de Arica, se decretó en las últimas horas el descenso de Colchagua a Tercera División, luego de que se desestimaran las denuncias en contra de Deportes Concepción.
