Everton y Santiago Wanderers jugaron un partidazo en la versión número 100 del clásico porteño. Ruleteros y caturros terminaron igualados 2-2 en un dramático final, donde parecía que los locales se llevaban la victoria.
Luego de los goles de Juan Cuevas a los 22′ y Bastián San Juan a los 78′, el equipo de Javier Torrente se relajó en la cancha y lo terminó pagando caro. Los pupilos de Miguel Ramírez no bajaron los brazos y dieron batalla hasta el final, encontrando el agónico empate.
El primero en golpear fue Néstor Canelón, quien en el 82′ aprovechó un tiro libre y metió un certero cabezazo para vencer a Johnny Herrera. El tanto despertó al plantel porteño, que se dio cuenta que tenía forma y fútbol para proponer algo más.
Y todo eso se vio reflejado en los 10 minutos finales, donde se volcaron de lleno al arco del ex Universidad de Chile para conseguir la igualdad. Una que llegaría en los descuentos.
Cuando el reloj marcaba los 92′ minutos de partido, Carlos Rotondi encaró por la izquierda e intentó sacar un centro al área, pero su remate terminó desviándose al ánguilo superior del palo izquierdo de Herrera.
Johnny se estiró lo que más pudo, pero no hubo caso. La pelota se coló, entró y decretó el 2-2 final. Un resultado emocionante para el regreso de uno de los partidos con más historia de nuestro fútbol.