No hay clásico sin polémica. Y si la actuación de Johnny Herrera en el duelo que Santiago Wanderers le ganó a Everton de Viña del Mar no dejó tranquilo a los fanáticos, menos después del desenlace del partido.

Enzo Gutiérrez cambió por gol el lanzamiento penal al minuto 90'+6 y les dio la victoria a los porteños. Pero lejos de abrazar al héroe, Francisco Alarcón se fue sobre el arquero ruletero para palabrearlo después del tanto de la victoria.

Herrera no se tardó en reaccionar: recogió el balón dentro de su portería, lo lanzó y se fue a buscar al insolente Alarcón, justo en medio de los abrazos del cuadro wanderino. Se encontraron cara a cara y el mediocampista se hizo, literalmente, "el larry".

"Él (Herrera) había ido a gritar un gol mostrando el escudo, si ven las imágenes. Entonces, (yo) la tenía un poquito guardada y ahora lo fui a celebrar en el arco de él. Aparte, Pichichi (Enzo Gutiérrez) la picó (la pelota). Había que disfrutar un poquito el gol", sentenció Alarcón a CDF.

Lo cierto es que el desaguisado entre ambos jugadores tiñó de polémica los últimos segundos de un clásico ardiente, en el que los Caturros se impusieron pese a comenzar en desventaja con anotación de Juan Ezequiel Cuevas.

En la segunda fracción, un balón que engañó a Herrera y remató sobre la línea Sebastián Ubilla, y el sabido penal de Enzo Gutiérrez, le dieron la vuelta al marcador y dejaron la victoria en poder del cuadro verde en el Estadio Nacional.