El 2001 fue un año espectacular para Jorge Garcés, porque formó un equipazo con Santiago Wanderers, que terminó siendo el monarca del Campeonato Nacional.
Pero eso no fue todo, porque el popular Peineta llegó para hacerse cargo de la selección chilena, que por entonces estaba en el último lugar de las Eliminatorias Sudamericanas, tras los malos resultados con Nelson Acosta y Pedro García.
Y el año para Garcés terminó con una gran sorpresa, porque fue contactado por el por entonces presidente de Boca Juniors para asumir la cabina técnica del cuadro Xeneize, lo que a la postre no se dio, y dejó al estratega fuera de Wanderers y de la Roja.
“Salí de Wanderers y de la Selección porque cometí el gran error de ir a conversar con Boca Juniors, me llamó Boca, imagínate, el ‘gran error’. Me llamó el señor (Mauricio) Macri para conocernos, quien posteriormente fue el presidente de la República Argentina”, dijo en primera instancia Garcés a La Redgoleta de RedGol.
“De los ocho candidatos que habían para dirigir a Boca en reemplazo de Bianchi quedamos dos, el Maestro Tabábez y yo. Viajé de un día para otro y se enteró el hijo de Don Reinaldo Sánchez, Luchito, y puso el grito en el cielo, dijo que eso no podía ser, que era una falta de respeto, y yo ya había hablado con Jorge Lafrentz que era el vicepresidente, le dije que tenía algunas alternativas después de que renové con Wanderers, que apareció en todos lados que renovamos, nos dimos la mano con Jorge, no se firmó ningún contrato, pero era un acuerdo consensuado, pero le dijo que además yo tenía la posibilidad de Argentina, que no sabía de dónde y también había una opción de España. Jorge me dijo que estaba encantado si tenía la opción de salir al extranjero, pero por ahora seguía en Wanderers”, agregó el ahora DT de Fernández Vial.
¿Por qué no llegó?
Jorge Garcés sigue con su historia del recuerdo, donde sueña en voz alta, porque indica que hubiese sido notable que el clásico argentino entre Boca y River fuera con los entrenadores chilenos en la banca, él en los Xeneizes y Manuel Pellegrini en los Millonarios.
“Cuando fui a conversar con Boca, al día siguiente o a los dos días viajamos a España con la selección chilena a enfrentar a la selección de Cataluña, y cuando estaba allá yo ya había sido despedido por Luchito, enojado. Imagínate lo que hubiese sido un clásico en Argentina, Manuel Pellegrini en River y a mí que me hubiese tocado Boca, pero para Luchito fue una falta de respeto y para mí había sido un orgullo para Wanderers y para Chile”, expresó.
Por último, el ex estratega de Deportes Concepción cuenta que finalmente le ganó la pulseada Óscar Táberez, quien tomó el cargo por su mayor conocimiento del fútbol argentino.
“Eran ocho candidatos, y llegar entre los dos últimos no lo podía ver lejano. De hecho hay una declaración al día siguiente de que yo estuve conversando con ellos, del señor (Pedro) Pompilio, vicepresidente en ese tiempo, que en paz descanse, que dice ‘Garcés tiene grandes posibilidades de ser el técnico’, salía el titular en La Estrella (diario de la Quinta Región) me acuerdo que lo entrevistaron. Me hicieron un seguimiento, me contaron durante la reunión que habían venido a Valparaíso a ver un par de entrenamientos, habían visto muchas entrevistas, habían visto jugar a Wanderers, estaba todo acomodado para que hubiese sido el técnico de Boca, ellos sabían que había estudiado en Europa, y al final se quedaron con el Maestro porque ya había dirigido en Argentina, y ese fue el plus que ganó la elección por él… Después de que hablé con Mauricio en su casa y con dos dirigentes más, me fui de ahí y el empresario y uno de los dirigentes me dijeron, que les había encantado la reunión”, cerró.