El ex presidente del balompié nacional, Harold Mayne-Nicholls, se sumó al debate por la polémica que genera el funcionamiento conjunto de la ANFP y la Federación de Fútbol de Chile prácticamente como un único agente.

Es sabido que en países desarrollados y competitivos, por ejemplo La Liga de España y la Real Federación de Española de Fútbol son organismos separados e independientes. Así, La Liga se preocupa por los intereses de los clubes y la competencia interna, mientras la RFEF lo hace en función de las selecciones.

En conversación con el podcast Pelotazo al Vacío de Jorge Gómez, Mayne-Nicholls hizo un mea culpa y reconoció de debería haber iniciado al menos la separación de la ANFP y la FFCh durante su período como presidente de Quilín.

“Yo no lo intenté, pero lo debí haber hecho y me arrepiento de no haber separado estas dos organizaciones. Tenía los votos, la ANFA estaba de acuerdo y lo iba a hacer en un segundo período. Pero no hubo segundo período”, dijo Harold.

El ex directivo agregó que, por ejemplo, “la convivencia bajo el mismo techo de estas dos organizaciones no permite actuar de manera ecuánime. Si un jugador es castigado en la ANFP, no tiene una tercera instancia para apelar. Si la Federación estuviera separada, no sólo jurídicamente, sino en todo su funcionamiento, con organismos propios, tendría esa opción, y eso permite posibilidades para todos”.

Consultado por el anuncio de la ministra del Deporte, Alexandra Benado, quien presentó al Senado un plan de modernización de las Sociedades Anónimas Deportivas que incluye la separación ente la ANFP y la Federación de Fútbol de Chile, Mayne-Nicholls sentencia que la esperada desunión debe generarse “de forma natural, no por un proyecto de ley o imposición del Gobierno”.