Con un presupuesto para infraestructura que superará los 170 millones de dólares, esta mañana se presentó en el Estadio Nacional el plan de desarrollo de las obras para los Juegos Panamericanos de 2023 en Santiago.
La cita dejará como legado las instalaciones de la Villa Panamericana que se eregirá en Cerrillos, así como las nuevas o remodeladas obras del Parque O’Higgins, el Estadio Nacional y el Parque Deportivo Peñalolén, con un total de 200 hectáreas de espacios para el deporte.
Una de las mayores novedades estará en el Estadio Nacional, el principal recinto deportivo del país, que seguirá su desarrollo después de que el ala nororiente se remodelara para los Juegos Odesur 2014. Se construirán cuatro nuevos recintos deportivos y otros cinco tendrán un mejoramiento.
El Parque Deportivo Estadio Nacional incluirá un Centro de Entrenamiento Paralímpico, un estadio de hockey césped y un centro de entrenamiento de deportes de contacto, además de un polideportivo concesionado; que se sumarán a la infraestructura actual.
Por su parte, la Villa albergará a las delegaciones que vengan al evento y tendrá 1.100 unidades de departamentos y una capacidad de 6.400 camas; el Parque O’Higgins tendrá un patinódromo y una explanada de deportes urbanos; y Peñalolén un centro de entrenamiento de deportes colectivos.