Viernes agitado y clave para el fútbol chileno en la sede de la ANFP. El consejo de presidentes debe votó el cierre adelantado de la temporada y ahora habrá que ver qué pasa con los ascensos, descensos y el sistema de campeonato para el próximo año.
Según consigna el CDF, entre las posibilidades que se manejan: mantener todo igual en la Primera A, B y Segunda División y establecer un coeficiente de rendimiento para que el próximo año repercuta el desempeño conseguido este 2019. Además se incluirían los dos descensos y ascensos en la Primera A.
Esto significaría que Universidad de Concepción y Deportes Iquique o la U bajarían a Primera B y Santiago Wanderers y, La Serena por ahora, regresan a Primera A. Homologando este caso a la siguiente categoría, San Marcos de Arica tendría su opción para volver a la Primera B desde la Segunda División.
La otra opción es la comentada Superliga de 32 equipos, con tablas diferentes para cada categoría y un coeficiente de rendimiento, donde primaría la idea de no consignar ascensos ni descensos en las tablas vigentes.
La tercera posibilidad por ahora es validar dos ascensos desde la Primera B al fútbol de honor y establecer la próxima temporada con 18 y 16 equipos respectivamente.
Sin embargo, la última opción que aparece como la menos perjudicial deportivamente se entrampa, pues los clubes de Primera A deben ceder una parte de la torta de los dineros del CDF para repartirse entre dos equipos más.
