Alexis Sánchez y el Olympique de Marsella tuvieron un arranque más que complicado en su duelo con el Sporting de Lisboa, pero supieron darlo vuelta en la UEFA Champions League. Al término de la primera mitad, el OM gana por 3-1 con el Niño Maravilla como figura, en un partido marcado por la demora de la visita en llegar al estadio y que obligó a retrasar el horario original.

El encuentro entre el colista y el líder del Grupo D estaba programado en un principio para las 13:45 horas de nuestro país. Sin embargo, problemas de último minuto dejaron la escoba en la organización y desataron la molestia de todos en los Phocéens.

Mientras Alexis Sánchez y el Olympique de Marsella esperaban en el estadio, el Sporting de Lisboa sufría con los tacos en Francia. El bus que los trasladaba hasta el Vélodrome se encontró con tráfico en las calles y tardó más de lo esperado en llegar hasta la cancha del OM.

Hasta ahí las cosas eran entendibles, pero la paciencia se acabaría rápido. Y es que ante la demora de los portugueses, la organización debió retrasar en 15 minutos el horario de inicio del encuentro, pero esto no sería una preocupación para el elenco visitante.

El Sporting de Lisboa se tomó todo con calma. Tanta, que incluso se demoró en salir a la cancha, lo que desató la molestia del plantel y del técnico Igor Tudor, que obligó a los árbitros a ir a apurar al equipo para que las cosas no tardaran más.

"Esto es la Champions League, no un torneo amateur", se quejaba el entrenador del OM. Pero la rabia no se acabaría, ya que apenas comenzó el encuentro, la visita se puso en ventaja. Fue en apenas segundos de iniciado el compromiso que Trincao encaró por derecha, se sacó rivales y sacó un remate que les dio el 0-1.

 

Eso sí, todo lo ocurrido serviría de motivación para el Olympique de Marsella. El encargado de encender la mecha fue Alexis Sánchez, que con una avivada a los 13' logró darle el empate a los Phocéens y así devolverlos al partido.

Esto derivó en que a los 16' Amine Harit anotara el 2-1, a los 23' el arquero Antonio Adán fuera expulsado por intentar despejar un balón con la mano fuera del área y en los 28' Leonardo Balerdi decretara el 3-1 con el que se fueron al descanso.

Una lección para el Sporting de Lisboa, que por llegar tarde entró con la cabeza en cualquier parte y paga caro los errores, sumando su primera derrota hasta ahora en la fase de grupos de la UEFA Champions League.

 

Revisa el reclamo del Olympique de Marsella por la demora y el gol del Sporting de Lisboa en la UEFA Champions League