El gran objetivo que tuvo Universidad de Chile, luego de una mala campaña, era salvar la categoría, en algo que viene siendo una tónica de los últimos años donde han tenido que lleva la pesada mochila de coquetear con perder la categoría en el Campeonato Nacional.

Una tarea que fue llevada adelante por el entrenador interino Sebastián Miranda, quien si bien contó con un gran respaldo tras vencer a Universidad Católica por Copa Chile, en los últimos partidos quedó claro de parte de Azul Azul es bien difícil que continúe en el cargo.

Por lo mismo, Luis Casanova, actual capitán de los azules, respalda el trabajo realizado por el ex defensor, aunque detalla que ese tipo de determinaciones no dependen del camarín.

"En lo personal me gusta Sebastián. Como entrenador nos ayudó mucho en un momento complicado, nos dio confianza, pero al final es algo que no pasa por mis manos, tiene que ver con la gerencia para buscar lo que es mejor para el club", comenta.

En ese sentido, saben que estuvieron cerca de amarrar una clasificación a Copa Libertadores, algo que se esfumó tras la eliminación contra Unión Española, donde, más allá de la mala temporada, aseguraba que era una opción que debían jugar con todo.

"El fútbol no es de merecimientos. Hay veces juegas espectacular y te llegan una vez y perdiste. Nos ilusionamos, lastima que no se nos dio. Si la oportunidad estaba ahí había que tomarla", detalla Casanova.

Si bien esperan cerrar el año ante Cobresal para hacer los análisis de la temporada, destaca que los problemas internos que vivieron en las últimas semanas en el plantel de Universidad de Chile no se traspasaron a la cancha.

"Creo que no influyó porque el equipo supo separar las cosas de lo que pasó dentro de la cancha y afuera. Por diferentes motivos, no sabría explicar por qué pasó la baja. El último partido tuvimos varias opciones, Pinto estuvo bien, nos sacó todo, y las que tuvieron la aprovecharon", finaliza.