Partir perdiendo no es algo que estaba dentro de los planes de la Universidad Católica, equipo en el que hace su debut de local en la banca Nicolás Núñez. Audax Italiano se puso prontamente en ventaja, gracias a un temprano gol de Gonzalo Sosa (15′).

Pese a esto, el cuadro precordillerano tuvo la posibilidad de empatar velozmente. Es que ni dos minutos después del tanto itálico, Clemente Montes ponía la igualdad, festejando con las manos en las orejas, al estilo Juan Román Riquelme.

Pero, para tristeza de la UC, una vez que los jugadores volvieron con el balón a la mitad de la cancha, el árbitro Felipe González Alveal, se comenzó a tocar la oreja, en señal de que algo le estaban soplando desde el VAR.

En la jugada previa al pase gol, pese a que Fernando Zampedri se encontraba habilitado, una vez que cabeceó el balón, éste pegó en Alexander Aravena, quien, aparentemente, se encontraba en posición de adelanto. Por ende, tras revisar con atención la jugada en la pantalla que se encuentra a un costado de la cancha, el juez decidió invalidar el tanto.

Pero eso no es todo. Cuando el reloj rozaba los 35 minutos, Fernando Zampedri cayó en el área y hubo una nueva revisión, esta vez por supuesto penal. Y… nuevamente, el fallo fue en contra de los Cruzados: el árbitro determinó que el contacto era casual y que no era influyente en la jugada, por lo que pitó saque de arco.

Otra jornada más en la que el VAR brilla y crea polémica en el torneo nacional. En esta ocasión, los hinchas de Universidad Católica son los que dedicarán bellos versos en contra del sistema tecnológico.