Universidad Católica y Deportes Iquique animaron la mejor serie de la segunda ronda deCopa Chiley tras un empate 4-4 en los 90 minutos que sumó un 5-5 en el global con el portero juvenil Vicente Bernedo como un héroe inesperado al ingresar de cambio a unos segundos del final.
En San Carlos de Apoquindo, los visitantes se hicieron sentir en los primeros minutos con dos jugadas por la izquierda que terminaron en goles de Álvaro Ramos (2′) y Carlos Espinoza (6′), ambos con participación de lujo del joven Alexander Oroz. En el medio, le anularon un gol a los Cruzados por un milimétrico fuera de juego de Fernando Zampedri.
Sin embargo, al minuto 23 llegó el descuento por medio de Alfonso Parot, quien mandó un potente remate con la pierna derecha para poner a los de Gustavo Poyet a un gol de la igualdad que forzara los penales.
Los dragones fueron nuevamente una ráfaga en el comienzo de la segunda mitad y Orozalargó la ventaja al 47′ bien habilitado por Ramos y que ponía todo muy cuesta arriba para los locales con el 3-1 en el marcador.
Los precordilleranos despertaron. Primero fue Diego Buonanotte con un buen movimientro dentro del área (58′) y luego llegaron dos precisos cabezazos por parte de Zampedri al 64′ y cuatro más tarde Diego Valencia que ponían en ventaja nuevamente a Católica que rozaba la clasificación.
Cuando todo parecía que los locales se iban a llevar la clasificación cayó el octavo gol de la noche y la igualdad para los dirigidos por Cristian Leiva, nuevamente en pies de Oroz, quien apareció en el corazón del área para mandarla a guardar en medio de una siesta de la defensa cruzada y de esta manera forzar los penales.
A falta de dos para el final, Poyet sorprendió dando ingreso al portero juvenil Vicente Bernedoen lugar de Sebastián Pérez para cumplir con la norma, siendo el debut del guardameta de apenas 20 años, quien respondió de la mejor manera en la tanda desde la pena máxima.
Todas las ejecuciones fueron perfectas hasta que Universidad Católica se puso en la cornisa con el fallo de Juan Cornejo e Iquique podía ganar en pies de Michael Contreras, apareciendo en ese momento la milagrosa mano de Bernedo. La muerte súbita continuó hasta que Ariel Coronel la mandó por arriba para dar punto final a una serie con muchas emociones.