Ariel Holan hizo un optimista análisis pese a la caída por 3-0 de Universidad Católica ante Internacional en su debut en la Copa Libertadores. “Hasta los 70 tuvimos alguna chance de gol, sobre todo en el primer tiempo. Por varios pasajes nos defendimos con la pelota. En el segundo tiempo, hasta el gol de tiro libre, que fue una jugada muy rara, no nos patearon al arco. En ese lapso. A partir de ahí, nos costó mucho salir de nuestro campo con el balón dominado. Y con la características de sus jugadores era muy riesgoso. Los errores son parte del juego y estamos en un proceso de crecer como equipo y a veces pueden salir bien o mal las cosas”, comentó el estratega de entrada.
“Más allá de la alineación, queremos llevar adelante un sistema de juego que nos lleve a defendernos con la pelota. Por pasajes lo hicimos muy bien pero después del gol de tiro libre nos costó muchísimo y ahí debemos seguir creciendo como equipo. Sobre la alineación, puede variar. Jugamos con tres delanteros, Fuenzalida se sumó mucho al mediocampo por la derecha. Pienso que, desde la estrategia, nos queríamos defender con la pelota y estar cortos cuando no la teníamos. El rival también juega y es un equipo de mucha jerarquía individual y colectiva. Tiene un ritmo y una velocidad que si uno no está bien con la pelota y no se protege jugando corto y agresivo, es difícil sostenerlos por 95 minutos”, profundizó.
Asimismo, recalcó que “tanto Guilherme y Thiago, más Edenilson en la mitad de la cancha, más los laterales, te dan cinco o seis futbolistas rápidos, dinámicos y técnicos. El rival tiene mérito, obviamente. Tras el primer gol quedamos shockeados. Pero tuvimos situaciones a lo largo del partido y podríamos haber hecho alguno que nos acercara o nivelara el partido. Hasta abrir la cuenta. Tras el tiro libre, Zampedri tuvo una muy clara. Pero bueno. En el balance final, cuando uno gana las conclusiones sonde una forma y cuando uno pierde, son muy útiles para aprender de la experiencia de jugar de este nivel de fútbol”.
Finalmente, el argentino expresó que “sabíamos que era una zona difícil y tratamos de equiparar fuerzas con nuestras herramientas. Hasta los 70 minutos el partido estaba en un terreno que nos invitaba a ser optimistas de cara al final. El desenlace fue en un ráfaga y quedamos lejos, pero en el balance final veo muchas cosas positivas. Hay que aferrarse y corregir progresivamente lo negativo. El equipo no fue vapuleado, estuvo presente y no se vieron diferencias que llamaran la atención”.