Natalie Portman ha llamado la atención en las últimas horas por sus declaraciones para el libro biográfico "Mike Nichols, A Life", para el que conversó con su autor Mark Harris para describir al director de "Closer" incluso como un "verdadero feminista".

Esto porque cuando la actriz se puso al servicio del cineasta "tenía diecinueve años y no había hecho nada de lo que tenía que investigar. Veía a Philip Seymour Hoffman escribir pregunta tras pregunta en su cuaderno, y Meryl Streep inventaba canciones para cantar y las guardaba en su bolsillo en caso de que su personaje de repente quisiera empezar a cantar".

Así, la inseguridad le jugó una mala pasada a Portman y fue en ese momento que descubrió la sensibilidad de Nichols, además de que era "el único hombre mayor que me guió sin ser un baboso".

Lo que pasa es que el realizador fue cuidadoso y protector con la actriz. Esto a propósito de que la película de 2004 tiene su icónica escena de striptease, en que le hace un baile privado al personaje de Clive Owen.

Portman comentó que Nichols "era un verdadero feminista genuino- No había nada más, excepto el hecho de que él te veía como un ser humano creativo, interesante y talentoso. Es la cualidad más rara, y no muchos directores de su generación la tenían".

De hecho, recuerda la actriz, "quería ver mi trasero desnudo incluso menos que mi padre".

"Nichols se aseguró de que Portman se sintiera cómoda con los ángulos, el vestuario y el movimiento, y la acompañó a través de la escena hasta que se sintió lista", describe también el texto de Harris.