Como el actuar de los fans tóxicos no tiene límites, una vez más terminaron por humillar a un actor de su serie favorita. Se trata de Kit Connor, uno de los protagonistas de Heartstopper, quien se vio obligado a revelar su orientación sexual a través de Twitter, después de que múltiples seguidores del popular drama acusaran a los responsables de la ficción de queerbaiting.
En abril pasado, la adaptación de la historieta de Alice Oseman se estrenó en Netflix. Así se pudo conocer el romance entre Nick y Charlie, una pareja LGBTQ+ que difícilmente se ha visto en otras apuestas cinematográficas o televisivas.
Por lo mismo, Joe Locke y Kit Connor ganaron una creciente popularidad y atención. Y Connor, responsable de interpretar a Nick en la ficción, tiene una escena muy icónica en la apuesta televisiva, cuando el personaje le confiesa a su madre en el último capítulo que es bisexual.
Desde entonces los fanáticos han acosado al actor con cuestionamientos sobre su propia orientación sexual, lejos de distinguir entre realidad y ficción, acusandolo a él y a la serie de queerbaiting.
El queerbaiting es un concepto utilizado para referirse a la acción de marketing que busca atraer a la comunidad queer o LGBTQ+ por medio de personajes que insinúan pertenecer a una minoría, pero definitivamente no pertenecen a ésta.
Kit Connor | ¿Qué dijo el actor? ¿Qué publicación hizo en Twitter?
La presión fue tanta que Connor finalmente tuvo que ceder. Cansado del acoso decidió reactivar su cuenta en Twitter para aclarar de una vez por todas la discusión, aunque no sin molestarse por el asunto de por medio. De paso, fustigó el nivel de toxicidad de ciertosseguidores de Heartstopper.
“Regresé por un minuto. Soy bisexual. Felicidades por obligar a un chico de 18 años a salir del closet”, escribió sarcásticamente.
Eso para luego añadir: “Creo que algunos de ustedes perdieron el foco de la serie. Adiós”.
Heartstopper y Kit Connor no son las primeras víctimas de este tipo de acoso a punta de queerbaiting. Figuras de alto perfil público como Billie Eillish, Bad Bunny, Harry Styles, Madonna y Christina Aguilera, además de ficciones como Glee, Sherlock y Riverdale, han sido blancos de tales cuestionamientos.
