Ignacio Román es uno de los rostros más conocidos de la versión chilena de “Masterchef”, pero hay un problema que ha arrastrado desde su aparición en TV: las bromas sobre su cara. El joven sufre de una parálisis facial que le ha generado varios problemas de autoestima.
En conversación con el programa “Sigamos de Largo”, el cocinero explicó lo difícil que ha aguantar las bromas. “Yo recuerdo un mensaje tuyo que tiraste en las redes sociales, si no me equivoco, como avisándole a la gente como que ‘córtenla con el tema de mi cara’“, le preguntóMaly Jorquiera.
Ante esto, el hombre de los asaditos señaló que “fue mucha mofa. Fue mucha la mofa. El ‘Popeye’. De hecho, en algún momento le quise cobrar los derechos al jabón Popeye, pero me arrepentí“.
Además, Román se refirió a los problemas con drogas que sufrió desde pequeño. “Cuando uno crece en el barrio, las drogas están siempre a la mano. Ahora las drogas están a la vuelta de la esquina. Después vino una etapa de rebeldía, pero también las malas juntas. Uno se deja llevar“.
“Y la cosa es la ley de Guru Guru: el que quiere, quiere. Uno acepta las amistades, uno acepta que camino tomar. Yo decidí tomar hace buen rato el camino“, agregó.
Finalmente el cocinero reveló lo que llegó a consumir. “Fumé marihuana, probé la cocaína, fumé pasta base. Todas las drogas. En algún momento de la vida yo las probé todas. Pero yo creo que la resiliencia y la forma de saber llevarlo, salir adelante“.
“Nunca estuve en un centro de rehabilitación. Por eso siempre he querido tener un centro de rehabilitación el día de mañana, mi fundación que se va a llamar De La Calle a la Cocina. Lo tengo más que claro. De hecho, la fundación ya está creada“, sentenció.
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