Las mellizas Sterling (Maddie Phillips) y Blair (Anjelica Bette Fellini) Wesley, de 16 años, se rebelan contra la comunidad sureña en la que viven y se unen al curtido veterano cazarrecompensas Bowser Jenkins (Kadeem Hardison) para vivir una increíble aventura en “Adolescentes Cazadoras de Recompensas”.
Sí, creer en una premisa tan absurda es un gran salto de fe. Porque la improbabilidad de que un oficial de libertad condicional cincuentón se asocie tan suelto de cuerpo con unas adolescentes, aunque tenga la coartada de un negocio establecido, parece altamente improbable. Pero una vez que lo aceptas, te abres a que la seriete entregue todo su potencial.
La combinación parece increíble, y realmente lo es, aunque de manera positiva. La trama te engancha rápido, porque no pierde tiempo en pequeñeces y se lanza con todo desde el primer episodio.
Esta es una montaña rusa. No sólo es una producción sobre adolescentes; sino que aborda el camino de un coming of age desde una postura inquieta, con temáticas muy relevantes y destellos de incorrección. Partiendo por una descarga de energía que mueve las cosas con una agilidad impresionante entre acción, humor, una pizca de drama, pero sobre todo diversión.
Maddie Phillips y Anjelica Fellini son dos poderosas fuerzas en pantalla, que en conjunto sacan adelante unos personajes que tienen la gracia suficiente para conquistarte desde el primer momento. Una por un lado instruida, inteligente, preocupada y cariñosa dentro de sus inseguridades, mientras la otra es caótica, impredecible y apasionada.
Así como siempre tienen el remate preciso para sus intervenciones cómicas, también aportan reflexiones mientras se abren paso dentro de una vida acomodada, llena de restricciones conservadoras y la pacatería cínica que las rodea. La velocidad a la que se cocina todo en las mentes de estas adolescentes es definitivamente un huracán de personalidad.
La mixtura es muy interesante aquí. Es como si los cuestionamientos de “la incomprendida”que irradia “Lady Bird” colisionaran con la exploración incansablemente curiosa de “Joven y Alocada”, al mismo tiempo que todo se sumergiera en la cruzada de liberación del dúo cómplice de “Booksmart”. Un mix explosivo cómico e irreverente que aborda desde las cursilerías de los púberes, los temores religiosos, la naturalización del uso de las armas, los prejuicios sociales, raciales y políticos, hasta la diversidad sexual y las limitaciones de una moral circunscrita al establishment de las élites.

La formación profundamente religiosa y su curiosidad llevará a Sterling y Blair hacia enfrentarse a las más diversas e hilarantes situaciones.
Uno de los puntos claves para la ficción son los cambios. El cómo las personas pueden modificar sus formas de actuar y de pensar, a fin de cuentas, de evolucionar, dependiendo de los entornos y circunstancias. Todas las tonalidades de grises quedan expuestas, mientras pasas de una risa explosiva a un momento profundamente emotivo, o a estar al borde de una lágrima. La serie te pasea por todos los estados.
Hay que prestar real atención a los intensos momentos que se logran entre Sterling y Blair, pero sobre todo entre Sterling y April; con giros que secretamente ya se quisieran los más nerds para sus superhéroes y villanos. Los últimos tres episodios son una bomba de emociones y, para qué decir, el final.

Kadeem Hardison es Bowser Jenkins en “Adolescentes Cazadoras de Recompensas”.
“Adolescentes Cazadora de Recompensa” es una agradable sorpresa. Ponemos pausa aquí a los dramas sombríos y agobiantes, para cambiarnos a una comedia realmente entretenida, con protagonistas adorables, aventuras que no te dejan de sorprender y una viaje que no se queda corto en originalidad. Un verdadero hit de Netflix.