El Voto Obligatorio está oficialmente de vuelta en Chile. La publicación oficial se concretó este miércoles en el Diario Oficial, así que se aplicará desde las próximas elecciones en adelante.
¿Qué implica el retorno del Voto Obligatorio en Chile?
La ley con carácter de reforma constitucional fue despachada por el Congreso a mediados de diciembre pasado, y ahora ya está vigente.
La nueva legislación indica que “el sufragio será obligatorio para los electores en todas las elecciones y plebiscitos, salvo en las elecciones primarias”.
Por otro lado, también establece que “una ley orgánica constitucional fijará las multas o sanciones que se aplicarán por el incumplimiento de este deber, los electores que estarán exentos de ellas y el procedimiento para su determinación”.
Eso sí, no hubo modificaciones sobre el registro electoral, por lo que la inscripción se mantiene de manera automática para los mayores de 18 años.
¿Por qué volvió el Voto Obligatorio?
Fue ya en un lejano 2009, que el voto voluntario cobró protagonismo, manteniendo la inscripción automática, pero su primera aplicación no fue sino hasta las elecciones municipales de 2012.
La baja participación que se registró con el correr de los años y, en contraposición, la alta concurrencia de electores que tuvo el plebiscito de salida del pasado 4 de septiembre de 2022, que tenía excepcionalmente como requisito el sufragio obligatorio, las fuerzas políticas decidieron avanzar en la restitución de la obligatoriedad de acudir a las urnas durante los comicios.
13 millones de votantes, de un padrón total de 15 millones, participaron al momento del triunfo el Rechazo, marcando una participación histórica tras los niveles de abstención en la década previa.
La ministra de la Segpres, Ana Lya Uriarte, anunció en octubre pasado que el Gobierno iba a apoyar la reforma, agregándole urgencia. Al mismo tiempo, comentó que “nos parece que es una realidad y está con el sentido común de las personas el hecho de que la participación ciudadana, en el ámbito cívico de elección de autoridades, es una obligación“.
“Tal como hay derechos ciudadanos, también hay deberes ciudadanos”, puntualizó la secretaria de Estado en la instancia.