Tras la polémica salida de la ex ministra Marcela Ríos como titular de Justicia y Derechos Humanos, este miércoles asumió el nuevo secretario de Estado de la cartera, Luis Cordero, quien fue designado durante el fin de semana por el Presidente Gabriel Boric. En su llegada al palacio de Gobierno, Cordero calificó al ministerio como "un sector desafiante, que es mucho más que indultos y el nombramiento del fiscal nacional”.

En su arribo al Poder Ejecutivo, el nuevo ministro evitó referirse a la crisis política generada por los indultos otorgados a 12 presos del estallido social más Jorge Mateluna, señalando que, "tan pronto yo me instale podría responder sin ningún problema", sobre la aplicación del beneficio a los 13 carcelarios.

Dentro de su primer punto de prensa como titular de Justicia y DDHH, se le consultó a Cordero acerca de si hubo irregularidades en el proceso de selección de indultados, señalando que aún no posee todos los antecedentes del caso. "Mi primer arribo es a La Moneda, todavía no llego al Ministerio de Justicia; quiero llegar, conocer a todo el mundo, y una vez que tenga todos los antecedentes, podré responder cada una de esas preguntas".

Eso sí, Cordero habló del caso Mateluna, quien fue indultado en 2004 y posteriormente detenido por el asalto a un banco ocurrido en 2013. En relación a si este perdonazo ameritaba una fundamentación especial, el ministro sostuvo que se trata de una discusión antigua: “aquellas personas que no reúnen los requisitos, en general pueden ser objeto de calificación fundada, y por eso estos decretos tienen un estándar de fundamentación relativamente similar".

"Todos esos decretos están fundados; otra cosa distinta es si uno comparte o no los fundamentos, pero eso es una discusión que prefiero tener con detención más adelante", detalló.

Cordero también habló del pronunciamiento de la Corte Suprema, defendiendo al Presidente y señalando que "la potestad de indultar en ningún caso es intromisión en otro poder del Estado; no hay en esa figura, que es constitucionalmente legítima, una objeción que uno pudiera plantear".