Corría el 17 de abril y Charles Aránguiz festejaba su cumpleaños 31°. Casi de la mano, Thomas Benedel, encargado de los videos del Olympique Marsella de Marcelo Bielsa entre 2014 y 2015 reveló la devoción del Loco por el seleccionado chileno, ex jugador de Colo Colo e ídolo de Universidad de Chile.

Tal como contó el ex colaborador del Loco, Bielsa lo mandó a hacer un resumen del juego del Príncipe para pedírselo como refuerzo al presidente del club francés.

Finalmente, el Loco Bielsa debió hacerse la idea que su regalón no sería alternativa, tal como sucedió en Sudáfrica 2010, Mundial para el que Aránguiz estaba considerado, pero no pudo asistir por motivos de fuerza mayor.

Charles Aránguiz, un joven Príncipe en la selección chilena.

Charles Aránguiz, un joven Príncipe en la selección chilena.

La nota

Autor: Nicolás Olea

Charles Aránguiz cumple 31 años en esta jornada y ha sido el foco de toda los la atención. El mediocampista chileno ha ratificado su estatus de figura tanto en la selección chilena como en el Bayer Leverkusen, en la elite del fútbol mundial.

Pero su ascenso pudo ser anticipado. Con 20 años, el puentealtino fue parte del proceso de Marcelo Bielsa hacia el Mundial de Sudáfrica 2010, cuando vestía la camiseta de Colo Colo y jugó tres amistosos, contra Paraguay, Panamá (2009) y Venezuela (2010).

 

El Príncipe completó la preparación para la Copa del Mundo en Juan Pinto Durán como parte de los 30 preseleccionados para la cita planetaria. Sin embargo, una lesión lo obligó a bajarse del equipo cuando era nombre seguro para el técnico rosarino.

El 17 de mayo de 2010, el Loco Bielsa decidió bajar del grupo de convocados a Pedro Morales, Jaime Valdés, Manuel Iturra, José Pedro Fuenzalida y Aránguiz, quien no pudo con una molestia física y tuvo que guardar el pasaporte.

 

 

El entrenador se quedó con las ganas por contar con el mediocampista y volvió a la carga cuando estuvo al mando de Olympique de Marsella (2014-2015) y el chileno pertenecía a los registros de Internacional de Porto Alegre.

Así lo reveló Thomas Benedel, videísta del equipo, en una entrevista con la prensa francesa. "Queríamos fichar al chileno Charles Aránguiz. Por la tarde, durante una de las siestas de los jugadores, pasamos cuatro horas haciendo montajes con sus jugadas", explicó.

Esta vez, el tope fue el presidente del Marsella, a quien Bielsa le presentó especialmente a su consentido. "Vincent (Labrune), que sabe de fútbol, me dice que no vale la pena, pero mira ... Marcelo mira con los pulgares discretamente. Fue una locura", dijo Benedel.