Santiago Wanderers salió al mercado con urgencia para amarrar un refuerzo que le permitiera dar algo de confianza en una posición donde había sufrido mucho últimamente. En el arco, lugar en el que Eduardo Miranda dejó muchísimas dudas recientemente.
Por eso mismo, la plana mayor del Decano salió en búsqueda de un golero experimentado. Y lo encontró en Venezuela: los caturros anunciaron el fichaje de este arquero de 37 años quien durante la primera parte de 2025 se desempeñó en el Monagas del fútbol llanero.
Es chileno y también registra pasos por el fútbol boliviano, donde defendió las camisetas de cuatro clubes. Todas las referencias son para Raúl Olivares, más conocido como el Araña. “Se transforma en el nuevo refuerzo de cara a la etapa final de la temporada”, fue el mensaje de Wanderers para darle la bienvenida.
Así las cosas, el Araña Olivares le puso fin a una estadía en el extranjero que se extendió desde enero de 2022. Jugó en Universitario de Vinto del balompié boliviano después de haber atajado en Deportes La Serena. Es un golero que fue sindicado como una gran promesa en Colo Colo, de donde llegó a la Roja y donde sufrió un golpe imborrable.
Así quedó Raúl Olivares en un Superclásico ante Universidad de Chile. (FELIPE ZANCA/PHOTOSPORT).
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Mercado de fichajes: la historia de Raúl Olivares, el nuevo refuerzo de Wanderers
Raúl Olivares movió el mercado de la Liga de Ascenso y fue anunciado como refuerzo de Santiago Wanderers. Este viernes 1 de agosto, el Araña se integrará a las prácticas a las órdenes de Domingo Sorace, quien quedó como director técnico luego de la salida de Héctor Robles.
En 2011, cuando la carrera de Olivares recién comenzaba, se hizo tristemente célebre por haber sido el arquero que recibió un icónico autogol: el de Osmar Molinas, quien le dio a Universidad de Chile un empate 2-2 sobre la hora en el estadio Monumental el 30 de octubre de aquel año.
La tarjeta roja a Juan Castillo. (MARCELO HERNANDEZ/PHOTOSPORT).
Todo comenzó con la expulsión del portero uruguayo Juan Castillo, quien obligó a Ivo Basay a reemplazar a Roberto Gutiérrez. En su lugar, mandó a la custodia de la portería a Olivares. Y antes de ese cabezazo hacia atrás de Molinas, el Araña recibió un golpazo que lo dejó casi noqueado.
El gol en contra de Osmar Molinas a Raúl Olivares. (ANDRES PINA/PHOTOSPORT).
Fue una patada de Albert Acevedo que le provocó un corte al meta. El juez del partido, Claudio Puga, ni siquiera le mostró amarilla al zaguero, que comenzó en la banca de suplentes que dispuso Jorge Sampaoli. Y que ingresó en lugar de Gustavo Lorenzetti. Una de las tantas historias que tiene en su variopinta trayectoria el Araña. El tiempo dirá cómo termina su aventura en Wanderers.
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