Lleno de rabia terminó el partido Novak Djokovic (1º de la ATP) y su festejo fue el reflejo de lo que pasó en los cuartos de final ante Matteo Berrettini (9º), porque el sebio tuvo que trabajar mucho para avanzar en Roland Garros.

El balcánico tuvo un arranque demoledor ante el italiano, pero con el correr del encuentro el 9º del planeta fue haciendo mejor las cosas, y apoyado por el público, estiró el desarrollo del compromiso, lo que no le gustó al serbio.

Finalmente el mejor jugador del mundo pudo mostrar su dominio en el marcador y se llevó una trabajada victoria, porque tras tres horas y 32 minutos de juego, por un apretado 6-3, 6-2, 6-7 (5) y 7-5.

Ahora se jugará la final anticipada en Bois de Boulogne, porque Djokovic se verá las caras con Rafael Nadal, el mejor jugador en la historia del torneo galo, donde el triunfador tendrá un cupo en la lucha por el título del próximo domingo.

El frente a frente entre Nole y Rafa está muy parejo, porque el serbio ganó en 29 ocasiones, mientras que el español lo hizo en 28. El viernes se jugará una semis con gusto a final.