Un gran revuelo se ha generado en los últimos días por el destape de un lamentable incidente de racismo y sexismo en el Rally Dakar que finalizó el 15 de enero en Arabia Saudita.

Los pilotos checos Ales Loprais y Petr Pokora tuvieron un diálogo que luego se hizo público en el que se refieren de forma vejatoria a Aliyyah Koloc y su hermana Yasmeen, hijas de Martin Koloc, campeón europeo de camiones y dueño del equipo Buggyra del Dakar. Ambas son pilotos menores de edad y fueron como reporteras al Rally.

"Por tercera vez, me estoy empalmando. Mira, la mujer negra de Roudnice va hacia la derecha", dijo Loprais y Pokora respondió: "Bueno... Esa no está mal, es pasable. La otra no".

La Federación Internacional del Automovilismo condenó lo ocurrido y señaló: "La FIA, junto con ASO y la FIA ETRC, condena enérgicamente los comentarios desagradables y degradantes dirigidos a las pilotos de carreras de camiones FIA ETRC Aliyyah Koloc y su hermana Yasmeen por dos competidores en el Dakar. Y continuará invirtiendo importantes recursos y experiencia en el desarrollo de iniciativas para inspirar y fomentar la participación de niñas y mujeres jóvenes en el deporte del motor. La adherencia a los principios éticos y la promoción de una cultura diversa e inclusiva en nuestro deporte son de suma importancia para la FIA y la Comisión de Mujeres en el Deporte de Motor de la FIA".

El Club del Automóvil de la República Checa también se manifestó: "El Club condena tales acciones. Cualquier alusión sexista o racista es completamente inadmisible y esto también se aplica a un deportista profesional. Nos negamos a tolerar retórica similar",

Ales Loprais se disculpó públicamente, lo que no fue suficiente para las hermanas Koloc, quienes también se expresaron: "El Dakar, el lugar en el que menos queríamos que sucediera esto, nos ha recordado el hecho de que todavía vivimos en un mundo donde las mujeres jóvenes son vistas sólo como objetos sexuales y no como seres humanos en toda regla. Vinimos al Rally Dakar para ver lo que nos espera. Queremos correr, queremos competir de forma justa y queremos mejorar y aprender. Además de la experiencia, también tenemos la sensación de que algunos competidores pueden vernos como meros 'trozos de carne'. El hecho de que seamos menores no nos salvó del comentario de Loprais".

"Tal comportamiento no tiene cabida no sólo en eventos profesionales como el Rally Dakar, sino en cualquier parte de la sociedad. Es patético, bajo y humillante", añadieron.