Universidad de Concepción se ha transformado en el equipo que domina en el basquetbol nacional. Campeones de las últimas dos ediciones de la liga, esta temporada apostaron por realizar una campaña a nivel continental como esas que hace rato no se conocían en nuestro país.
Y vaya que lo lograron. El equipo penquista avanzó de ronda y se metió entre los ocho mejores del continente en la Liga de Campeones de las Américas, el certamen continental más importante que organiza la FIBA y que reune no solo a los más grandes de Sudamérica, sino que también del caribe y México.
En cuartos de final aparecía un escollo mayor: Flamengo de Brasil, dos veces campeón de la competencia y que aparece como uno de los grandes favoritos para llevarse este certamen.
Un favoritismo que dejaron claro en el primer partido de la llave, jugado en Concepción. Ahí, los brasileños se impusieron por un claro 92-64 y trasladaron todo a una casi segura definición como locales en Rio de Janeiro.
Sin embargo, como visitante, el Campanil se hizo más fuerte que nunca y jugó un partidazo en el mítico Maracanazinho. De igual a igual, llegaron a la parte final del partido y cuando solo quedaban 4,1 segundos para el final, estaban arriba por 86-85.
Pero como suele pasar en el deporte chileno, una arremetida final del Flamengo y una canasta imposible anotada por el Mengao, terminó siendo doble y falta para los locales y dándoles la victoria por un definitivo 88-86.
En caso de ganar el Campanil, se iba a jugar un tercer y definitivo partido en el mismo estadio. Ahí se hubiese definido la clasificación a las semifinales de la competencia, instancia a la que finalmente pasó el Flamengo con un 2-0 en la serie.
