[[Jorge Sampaoli]] fue presentado ayer en el Santos de Brasil. Los hinchas lo recibieron con los brazos abiertos mientras que el club paulista le abrió la billetera para convertirlo en el entrenador mejor pagado del fútbol de ese país. Pero hay algo más: un altísimo presupuesto para refuerzos que el casildense espera aprovechar.
Por esta razón ya comenzaron las tratativas para incorporar a los jugadores necesarios para el armado del DT. Y Sampa se fue a la segura y puso sobre la mesa a dos de sus dirigidos mientras estuvo al mando de Universidad de Chile y la selección chilena: Charles Aránguiz y Eduardo Vargas.
El caso de Turboman ya era conocido y fue adelantado por la prensa brasileña. El delantero de Tigres ha mejorado sus números, pero el fracaso del equipo en la última Liga MX puede ser su puerta de salida.
Lo que no se conocía era lo de Aránguiz, que recién ha conseguido ponerse a punto en lo físico para integrarse de lleno al Bayer Leverkusen después de una rebelde lesión. El Príncipe termina contrato en junio de 2020, por lo que podrá negociar como jugador libre al término de la presente temporada en Alemania.
El futuro, eso sí, estará en los puestos claves. “Analizaremos las prioridades. Hay que revisar bien lo que tenemos en el equipo, para luego ver lo que podemos traer”, advirtió el también ex entrenador de la seleccion argentina, Sevilla y O”Higgins de Rancagua.
El casildense además reconoció que tenía un buen panorama del fútbol brasileño gracias a la Roja. “Cuando dirigía la selección de Chile, veía a Valdivia y Eduardo Vargas en Brasil. Además enfrenté equipos de Brasil en Copa Libertadores y Copa Sudamericana. Hay entrenadores de gran capacidad e historia, que respeto mucho”.
De todas formas, Aránguiz no es el único “ex” al que apuntará Sampaoli, quien mencionó con nombre y apellido a Paulo Henrique Ganso. “Trabajé con Ganso en Sevilla. Pedí su contratación. Tiene una calidad increíble pero no lo ha podido consolidar en Europa”, dijo sobre el volante a préstamo en Amiens de Francia.
Fotos: Agencia Uno