No nos vamos a olvidar y ellos se preocupan de que no lo hagamos. Argentina fue el último campeón del mundo, así como dos veces primer lugar de la Copa América.
Los argentinos se han encargado de repetirlo en múltiples ocasiones. De hecho, venimos de un mes de pachotadas y verborrea trasandina, recordándonos a Qatar 2022 y resaltando el triunfo en Estados Unidos.
Parecía que el nexo entre fútbol y Argentina iba a disiparse en el horizonte, con la llegada de los Juegos Olímpicos. Por fin íbamos a tener un par de semanas de descanso.
Sin embargo, el fútbol, así como el mate o el fernet, son cosa indisociables de la sociedad trasandina. Es por eso que, incluso en los Juegos Olímpicos y cuando no se juega con el balón en los pies, algo de ello está presente.
Primera dorada che
En esta jornada se competía la prueba de BMX Freestyle en París 2024. Allí, uno de los candidatos a medalla era el argentino José “Maligno” Torres, quien quería recobrar la presea dorada para Argentina, esquiva en Tokio 2020.
Así sucedió. Con un puntaje extraordinario, 94.82, el nacido en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, se consagró como medallista dorado. Eso sí, contrario a la Albiceleste, el argentino fue vitoreado por el público francés. No hubo silbidos.
Lo extraño vino a la hora de su premiación. El encargado de colgarle la medalla de oro en el cuello al argentino fue nada menos que Gianni Infantino, el presidente de la FIFA. ¡Que hasta en BMX Argentina sea premiada por este hombre calvo!