La llave entre Universitario y Corinthians en Copa Sudamericana terminó en un escándalo. El Timao se impuso por 2-1 y se clasificó a los octavos de final de la competencia, dejando al elenco peruano en el camino. Con el segundo gol brasileño, ambas escuadras explotaron.

A los 92′, Ryan anotó el 2-1 definitivo y se sacó la camiseta al celebrar, siendo amonestado. La celebración del brasileño generó molestia en el plantel universitario y fue ahí que se desató la batalla campal que terminó con cinco expulsados en el final.

Los jugadores de ambas escuadras se agarraron en la cancha, con golpes que iban y venían desde los dos lados. Poco después de que inició la trifulca, la policía se vio obligada a entrar al terreno de juego e intervenir, separando al plantel de Universitario y Corinthians.

El chileno Rodrigo Ureña no quedó indiferente a la gran pelea que se armó e incluso se enfrentó a los uniformados, mientras otros de sus compañeros golpeaban los escudos de los policías. En las gradas, la seguridad contenía a los hinchas en el Monumental de Lima.

Por su lado, el plantel de Corinthians fue escoltado por las fuerzas especiales y la seguridad del estadio hasta la banca de su equipo, esperando que se calmaran las aguas en la cancha para poder reanudar el partido, al que sólo le faltaban los minutos de descuento.

Finalmente, Ryan y Matheus Araujo de Corinthians, y Horacio Calcaterra, Matías Di Benedetto y Piero de Guzmán de Universitario fueron pintados de rojo. Cabe recordar que Universitario ya había protagonizado una batalla campal en Copa Sudamericana, pero en la última fecha de fase de grupos cuando enfrentaron a Gimnasia.