El mundo fútbol está consternado y pone sus ojos en el grave estado de salud de Juan Izquierdo, el defensa uruguayo de 27 años que se desplomó en pleno partido de Nacional, como visita contra Sao Paulo por la revancha de los octavo de final de la Copa Libertadores.
En principio se había informado que el futbolista había sufrido una arritmia cardiaca, pero con el pasar de los días el diagnóstico se actualizó como paro cardiaco. Izquierdo se mantiene hospitalizado en Brasil y su vida se mantiene en riesgo.
El mismo presidente de Nacional, Alejandro Balbi, detalló la gravedad y complicado momento que atraviesa el jugador y el club a nivel institucional.
“La situación general exigía comunicar (lo del paro cardiaco) porque había mucha avidez por la información, pero no se podía perder de vista que había una familia en Montevideo con información fragmentada y hasta falsa, dentro de un dolor inconmensurable”, dijo el directivo a 100% Deporte de Sport 890.
Plantel de Nacional y la familia están destruidos
Agregó que los padres Izquierdo “están destruidos. La ley de la vida es que pasen situaciones límites los padres y no los hijos. Y hay que sumar que tiene una mujer de 23 ó 24 años, una niña de dos años y un bebé que nació un día antes del partido contra River en el Saroldi, y que lo dejaron en Montevideo con suplementos. Es todo complicado, con el componente psicológico que conlleva. No alcanzan las palabras para pintar el panorama desolador que estamos viviendo”.
Respecto al plantel y compañeros del defensa, el presidente de Nacional reveló que “lo único que se hizo fue una reunión grupal, una charla, y largarse a llorar. No queda otra. Esto que nos está pasando es inconcebible y la trascendencia que ha tenido a nivel mundial demuestra por sí solo que es una tragedia. No recuerdo situaciones similares en América”.
“Nuestro plantel está destruido anímicamente, pero estoy orgulloso como presidente de tener jugadores que estuvieron a la altura de las circunstancias para contener a la familia de un compañero. Dentro de lo malo, hay un grupo humano espectacular”, añadió Alejandro Balbi.
Por último, tuvo palabras de agradecimiento para el Sao Paulo. Incluso se disculpó porque el plantel completo de los brasileños quería visitar a Izquierdo en el hospital: “es reconfortante ver gente con empatía. Tuvimos que decirles que era imposible porque no estaban autorizadas las visitas. Quisieron estar cerca y saber cómo estaba el colega”, sentenció.