Manchester City no pudo remontarle un duro partido al Southampton y terminó empatando 1-1 como visitante, un resultado que pone un poco más de emoción a la Premier League que tiene la balanza muy inclinida hacia el bando del equipo ciudadano, con un tremendo rendimiento reciente.
El partido fue bastante sufrido para los de Josep Guardiola pues desde muy temprano tuvieron que remar con desventaja con un auténtico golazo por parte de Kyle Walker-Peters recibiendo dentro del área un pase desde el sector derecho y definió con toda la categoría del mundo con un remate con el exterior de su pie que fue imposible para Ederson.
Le costó bastante sacarse el golpe a los ciudadanos que en el resto del primer tiempo tuvieron la pelota como es acostumbrado pero las oportunidades no sobraron y el arco del Soton no pasó demasiado sobresaltos. De hecho, algunas ocasiones lograron tener pero con la puntería fallando.
Esta falta de claridad de los de casa envalentonó a los visitantes y poco a poco fueron acorralando a sus rivales encontrando el gol de la igualdad al 65' con un cabezazo del defensor Aymeric Laporte tras un tremendo centro desde la derecha en un tiro libre por parte de Kevin de Bruyne.
Dos pelotas en los palos impidieron la remontada del Manchester City que frena en 11 la racha de partidos seguidos ganando y si bien es cómodo líder de la Premier League puede quedarse a seis puntos del Liverpool, en caso que los de Jürgen Klopp se impongan en su calendario pendiente.
