Antes del sorteo de cualquier competición internacional, habitualmente se hace un sorteo. En el caso de la Copa Libertadores se realizó uno recién, en el que Boca Juniors y River Plate, finalista y campeón de la última edición y archirrivales del fútbol trasandino, se enfrentarían en los octavos de final. 

Aquello hizo palidecer a más de uno, especialmente con el recuerdo de la última y accidentadísima final del último torneo, que por hechos de violencia debió terminar disputándose en el Santiago Bernabéu de Madrid, al haberse suspendido el duelo de vuelta en el Monumental de River. Al final el cuadro Millonario se llevó el choque de vuelta 3-1. 

Por suerte para algunos, especialmente las autoridades de Buenos Aires, esto fue solo un simulacro que además de dejar el superclásico argentino en ese cruce, dejó por el mismo lado el histórico clásico brasileño Gre-Nal, entre Gremio de Porto Alegre - verdugo de la Universidad Católica - e Internacional de Porto Alegre - verdugo de Palestino -, uno de los choques con más historia en Brasil. 

Recordemos que en esta fase de la competición, ya no importa que coincidan dos clubes del mismo país en los emparejamientos. 

Mira cómo quedó en ensayo: