Una leyenda es lo que fue Edson Arantes do Nascimiento, mejor conocido como Pelé y que falleció esta tarde a la edad de 82 años. Y es que el Rey que ganó tres mundiales con Brasil hizo historia dentro y fuera de la cancha, por la importancia de si figura en el deporte.

Una de tantas anécdotas de las que tiene el histórico 10 de la Verdeamarela no tiene que ver directamente con el futbol y si con un conflicto bélico.

El día que Pelé detuvo la guerra

En plena Guerra Fría y donde los conflictos territoriales abundaban en el mundo, en Áfreica no era la excepción y en 1967 existía una guerra entre Nigeria y Biafra, territorio del país que buscaba ser independiente.

Pero nada de eso importó cuando dos años después la selección brasileña llegó a jugar un par de amistosos con Pelé a la cabeza.

Cuenta la historia que por 72 horas todo se detuvo y no existió guerra, todo para ver a O Rei en la cancha. Según cuenta la revista Time, incluso hubo un pacto de no agresión mientras estaba la Canarinha de paso.

Si bien nunca se confirmó y según recogen expertos esto nunca existió, para muchos quedando como solo un mito, la visita de Santos a la zona efectivamente sucedió y con un esfuerzo extra en la seguridad para llevar a cabo estos compromisos.

Alto al fuego o no, la figura que representaba Pelé daba para estas historias en un periodo en el que mientras el astro del futbol brasileño brillaba en los mundiales, los conflictos bélicos no cesaban en una oscura época de enfrentamientos militares, políticos e ideológicos. De hecho, aquel guerra civil conocida como la Guerra de Biafra terminó con cerca de tres millones de muertos, posicionándose como una de las guerras más brutales del siglo.