21 de los 27 países de la Unión Europea han firmado una declaración, que la ministra danesa Ane Halsboe-Jørgensen presentó a finales de noviembre en Bruselas en una Reunión del Consejo de la UE.

La declaración enfatiza la necesidad de una mayor transparencia y democracia en las organizaciones deportivas internacionales al momento de elegir los anfitriones para futuros eventos deportivos.

La declaración se produce a raíz de las críticas a la FIFA, por la elección de Qatar como sede de la Copa del Mundo en 2022.

"Se trata de una presión política en un proceso del que son responsables nuestras organizaciones deportivas internacionales. Esa presión continuará y continuaremos dialogando con las organizaciones deportivas sobre cómo ven mejor que podemos apoyar políticamente", señaló Halsboe-Jorgensen.

Luego, afirmó: "Es importante para mí que el deporte se convierta en algo sobre lo que podamos encontrarnos sin que esté a la sombra del peligro, por ejemplo por los derechos humanos, de los que lamentablemente hemos visto ejemplos con Qatar".

En tanto, el director internacional de Play The Game, Jens Sejer Andersen, comentó: "Tal declaración sirve como recordatorio de que los países no están del todo satisfechos con las políticas de las principales organizaciones deportivas".

La mayoría de los países de la Unión Europea apoyaron esta declaración, tales como Alemania, Francia, España e Italia. Al final del documento, sólo falta la firma de Hungría, Croacia, Polonia, Chipre, Malta y Letonia.