El partido entre Argentina y Croacia dejó la jugada más polémica en lo que va del Mundial. Con el marcador 0-0 y un trámite muy cerrado, el árbitro italiano Daniele Orsato sancionó un penal a favor de los trasandinos luego de un choque entre el portero europero Dominik Livaković y el delantero sudamericano Julián Álvarez.
El ex árbitro mexicano Felipe Ramos Rizo, quien pitó en Corea-Japón 2002, le dio muchas vueltas al tema en su Twitter. Primero manifestó "por favor, eso no es penal, el portero de Croacia está detenido y el argentino choca", algo que horas después volvió a explicar.
"Datos importantes por lo que no se debió sancionar penal: El pie derecho del portero siempre está en el piso, el contacto es inevitable por la inercia de la jugada, el balón", comentó el azteca. Complementó con un "nunca existe zancadilla el contacto es inevitable".
Estas palabras recibieron un apoyo inesperado: el de Iker Casillas. El portero de la selección española metió la cuchara en buen chileno para refrendar lo que expuso Ramos Rizo. "Totalmente de acuerdo", fueron las palabras del ex Real Madrid.
Esto demuestra el revuelo que hay en Europa por la jugada y por todo lo que sucede en el Mundial, donde los cobros arbitrales han desatado mucha controversia como ocurrió en esta ocasión por el penal que permitió a Argentina abrir el marcador.
De hecho Luka Modric, un jugador que siempre se muestra muy tranquilo, aseguró después del encuentro ante los argentinos que esta falta cobrada por Orsani terminó golpeando muy fuerte a Croacia, golpe del que no se supo levantar.
