En algún momento, Néstor Gorosito manifestó que no tiene mucha simpatía o “feeling” con los entrenadores que no fueron jugadores, algo que aclaró en entrevista con el Lado B, el canal de YouTube de Leo Burgueño.
“No es que no me gusten. El fútbol no es una regla simple y básica, no es dos más dos es cuatro. Hoy tres más tres es ocho, mañana seis y otro día, dos. Es muy relativo todo. ¿Qué es saber y qué no? No me gusta la soberbia. Hay una línea. Hablan todos igual. Puedes copiar ciertos tips, pero pareces un histérico al costado del banco, son copias, no son originales. Para mí, no tengo la verdad absoluta”, aseveró el Pipo.
“Yo no hice el curso de entrenador dos años. Arranqué en kinder con tres años. Hice kinder, divisiones infantiles, secundaria, las inferiores, luego Primera 20 años que sería la universidad. Después de 30 años de jugar a la pelota no tengo idea si me quiero dedicar a esto me dedico a otra cosa”, abundó.
Consultado por esta “planificación” que ofrecen muchos entrenadores, recalcó que “hoy todos dicen lo mismo. Fíjate que los europeos copiaron a los sudamericanos la técnica y todos quieren entrenar con los europeos. Le sacan la inventiva a los jugadores sudamericanos. ¡No hay un que gambetea! ¡Uno que haga gol de tiro libre en Argentina! ¡Uno! Que tenga un tiro libre y uno diga ‘este es gol’. Hoy todo es pase y recepción. Está bien, pero se pierde la improvisación, lo que desequilibra. Son todos iguales, pase y recepción. El wing entra, el marcador de punta pasa, el wing retrocede, el volante interno aparece y se la tira al 9. Demasiado mecanizado, como si fueran muñequitos”.
“Y lo que he visto es que el gran porcentaje de todo estos cuando ganan, ganan ellos y cuando pierden, pierden los jugadores porque les faltó concentración o intensidad. El entrenador siempre pierde y ganan los jugadores, es una regla simple y básica”, complementó.
Eso sí, manifestó que no apunta a alguien en particular pese a las claras referencias. “No me refiero sólo a Sampaoli, la gran mayoría hace lo mismo. Él hizo jugar muy bien a la U de Chile, muy pero muy bien. Lo mismo a la selección chilena, que venía con una base importante. Beccacece hizo jugar bien a Defensa y Justicia. No digo que es por uno o por otro”, expresó.
“Yo jugué 30 años al fútbol, no necesito un dron para ver si le ganan la espalda al 4. Como esos que dicen que vieron 30 veces al contrario, como si eso fuera una virtud. ¿Cómo vas a ver 30 partidos a un rival?Para mí es una incapacidad más que una virtud” – Néstor Gorosito en diálogo con Leo Burgueño en su canal de YouTube
SU ROUND CON HOLAN
En algún momento, Ariel Holan se reunió con Jürgen Klopp y el Pipo disparó sin anestesia: “Acá hay uno que se sacó una foto con Klopp y se cree que es entrenador. Yo fui a un recital de Andrea Bocelli y no me creo cantante”.
Si bien la referencia era clara, Gorosito descartó algo personal con el DT de la Universidad Católica, pero también deslizo una crítica al estilo.
“Nunca nombré a nadie, pero acá hubo una moda de ir a conocer a entrenadores europeos. Conocer cosas teóricas en una cosa, saber es otra. No lo dije ni por Holan ni por nadie, sino porque todos iban a ver a los entrenadores europeos. Mira, a nosotros nos vino a ver Marcus Sorg, DT de la Sub 21 de Alemania, campeón de esa categoría y ayudante de Joachim Löw. ¿Viste en algún diario que el tipo estuvo una semana viendo cómo trabajábamos nosotros? Imagínate si va donde otro. Aparece en todos lados. Argentina hoy es así”, aseveró.
“Yo jugué 30 años al fútbol, no necesito un dron para ver si le ganan la espalda al 4 o para darme cuenta dónde están los espacios en el medio. Como esos que dicen que vieron 30 veces al contrario, como si eso fuera una virtud. Si viste 30 veces al rival, dedícate a otra cosa. ¿Cómo vas a ver 30 partidos a un rival? Como que vende eso. Al dirigente le gusta escuchar eso. Para mí es una incapacidad más que una virtud”, remató.
¿VOLVERÁ A LA UC COMO DT?
Finalmente, se refirió a un posible retorno como DT a la UC y por qué no se ha dado aún. “Me decían que era (Luis Felipe) Gazitúa el que no quería que volviera. Pedí una reunión con él y me dijo que no era así, me dio su palabra de honor. ‘Ya está, olvídese entonces, debe ser así’. Y ahí terminó. Que incluso sus hijos tenían fotos mías en la habitación. Ya está, en algún momento se dará”, expresó.
“Yo tenía todas las razones. El club me tenia que dar el dinero o un partido despedida. No me hicieron ni una ni la otra. Yo le pedí como mil veces el partido de despedida y se fue dilatando, hasta que se vencieron los tiempos jurídicos. Yo no quería hacerle juicio al club”, concluyó.