Luego de toda la polémica vivida en nuestro país, Coquimbo Unido finalmente pudo recibir a Defensa y Justicia por Copa Sudamericana en Paraguay. Los piratas y el halcón animaron una semifinal de ida muy pareja en la cancha, donde todo terminó con un empate sin goles.

Los aurinegros dejaron atrás el papelón en Chile, sacaron adelante la tarea y rescataron un resultado que les permite soñar de cara al duelo en Buenos Aires del día sábado. Pero más importante, les dejó claro que hay con qué derribar al elenco argentino en busca de la final.

Primer tiempo de intenso estudio

La tensión de todo lo ocurrido durante la semana hizo que ambos equipos salieran a la cancha a ver qué le proponía el rival. Y si bien los aurinegros tuvieron una llegada en el arranque con un remate de Rubén Farfán que dio en el palo, el resto de las acciones fueron muy parejas.

Los dos se pararon en la cancha con equipos cortos y que hicieron que la disputa del balón marcaran los primeros 45’. Los transandinos apelaban a la efectividad de Braian Romero, que esperaba balones cerca del área para hacer daño. Pero cada vez que fue necesitado, Matías Cano respondió.

Fue sobre el final que Romero tuvo una libre frente al arco, pero intentó meter un sombrero que se le fue por mucho. Con la paridad en el placard, el partido quedaba abierto para el complemento.

Defensa bombardeó y Coquimbo blindó el arco

Defensa y Justicia tenía claro que en el segundo tiempo anotar un gol era fundamental. Apenas sonó el silbato, se fueron de lleno a buscar el arco rival y por poco encontraron la apertura de la cuenta, pero no había forma de derrumbar el muro de Cano.

Coquimbo aguantó pero luego de que le cayeran encima del pie, en el 54’ Manriquez tuvo que salir. La salida del volante hizo que el equipo retrocediera un poco más y apelara a solo hacer daño a la contra. Eso sí, Farfán, Palacios y Abrigo no quedaron con pelotas en ventaja para hacer daño.

Crespo movió las piezas para intentar que el ataque siguiera con la misma intensidad, pero no hubo nada que hacer contra la última línea pirata. En el 74’ los argentinos reclamaron una mano, pero el VAR desestimó el criterio y todo se mantuvo sin goles. Y fue en el 89' y 92' que estuvo el triunfo para los chilenos, pero Farfán se acomodó demasiado para la pierna derecha cuando iba solo y se farreó la chance.

Con 4' minutos en los descuentos, los dos equipos se fueron a jugar la vida para irse con la ventaja a la vuelta. Pero pese a todos los esfuerzos, el duelo terminó 0-0, lo que deja la definición del finalista de Copa Sudamericana para el sábado en Argentina. Coquimbo Unido ahora zarpa rumbo a Buenos Aires con el sueño intacto.