Leicester City demostró por qué es uno de los mejores equipos en la actualidad en Inglaterra y dio el golpe sobre la mesa al llevarse el título de la FA Cup en una apasionante final frente al Chelsea, que recibe un duro mazazo a poco más de 10 días de la definición de Champions League frente al Manchester City.

El partido, además, significó el regresó de los aficionados a los estadios en Inglaterra y el mítico Wembley recibió 22 mil personas que se hicieron sentir para darle un toque aún más especial a uno de los compromisos más llamativos de la temporada.

 

Pese a ser un marcador corto, las acciones fueron sumamente entretenidas y todo tomó mayor color al minuto 63 cuando Youri Tielemans firmó una auténtico golazo con un derechazo de cerca de 30 metros que fue al ángulo del arco defendido por Kepa, que puso en ventaja a los de Brendan Rodgers.

A partir de ahí, los dirigidos por Thomas Tuchel se hicieron los grandes protagonistas en búsqueda del empate y estuvieron cerca, faltándole tan solo unos centímetros. Primero con un par de intervenciones espectaculares por parte de Kasper Schmeichel que pusieron el cerrojo en su portería.

La última gran acción del partido fue gol del Chelsea con una internada de Ben Chillwell, quien centró por bajo para forzar la anotación en propia puerta del experimentado Wes Morgan, pero al verse la repetición quedó claro que el carrillero izquierdo estaba adelantado por muy poco al minuto 88. Eso calmó las aguas y Leicester pudo aprovechar para alzar el título.