Este lunes sonaron las alarmas en el PSG, luego de que su gran estrella, Kylian Mbappé, se lesionara en el entrenamiento.
El delantero campeón del mundo recibió un pisotón del volante senegalés, Idrissa Gueye, y tuvo que abandonar la práctica por precaución.
Lo complicado de todo esto es que el equipo parisino enfrenta al Real Madrid el miércoles por la vuelta de los octavos de final de la Champions League.
Mbappé ya había sido clave en la ida jugada en el Parque de los Príncipes, cuando anotó el único gol en los descuentos del partido.
La desafortunada jugada tuvo desagradables consecuencias para el mediocampista africano, pues recibió cientos de insultos, entre ellos varios racistas.
De esta forma, tuvo que inhabilitar los comentarios de Instagram, al igual que su mujer Pauline, quien también fue víctima de estos abusos.
Pero el gran Mbappé no se quedó de brazos cruzados y salió rápidamente a respaldar a su compañero de equipo con un mensaje en sus historias de Instagram.
"Todos juntos. Siempre. Esto es París", dijo Mbappé, quien aún no está descartado del vital choque en Madrid, que también significa mucho para él, pues es el club que quiere ficharlo cuando termine esta temporada.
