Este 12 de junio se cumplen 20 años del mayor fracaso de Marcelo Bielsa en su carrera como entrenador: la eliminación en primera fase del Mundial de Corea del Sur-Japón con la selección de Argentina, a la cual llegó como una de las favoritas por la gran eliminatoria realizada y al plantel lleno de figuras.

Inició ganando 1-0 a Nigeria, luego cayó por la mínima contra Inglaterra y terminó igualando 1-1 con Suecia, partido que selló la salida de la albiceleste de un Mundial donde jamás juntó a los goleadores Gabriel Batistuta y Hernán Crespo, como se lo pedía la prensa y los hinchas.

"Fue durísimo, el vestuario más triste que me tocó vivir. Me dejó una cicatriz para toda la vida", comentó a Infobae Juan Pablo Sorín, lateral izquierdo de ese elenco que le costó mucho reponerse tras esa enorme frustración.

Hasta el día de hoy en Argentina se dividen entre bielsistas y anti bielsistas, debido a que el camino no llegó al éxito. Y una d elas razones es la enorme intensidad que el Loco quiso imprimir en los juagdores, de la mano del fallecido preparador físico Luis María Bonini.

"Bielsa tuvo sus errores", señaló en Fox el delantero Claudio López. Y apuntó a la preparación de los jugadores en Europa, en la previa del viaje al Mundial.

"Llegamos muy tocados. Cuando estábamos en Roma, tuvimos un entrenamiento muy intenso. Fueron cosas que se pudieron evitar y hacerlas de otra manera. Estábamos cargados y muchos jugadores estábamos débiles físicamente", justificó el ariete..

ejemplificó con que muchos jugadores no pudieron actuar. "La lesión del Pelado (Almeyda), Caniggia y el Ratón (Ayala) fueron algunos ejemplos. Lo hablábamos con el profe Bonini, porque teníamos un nexo extraordinario con él. Marcelo (Bielsa), en cambio, en el uno a uno era más distante", contó el Piojo.

Ariel Ortega cuenta una anécdota de ese día, al ver destrozado a Bielsa. "Fui el primero en entrar al vestuario y Marcelo estaba abatido. Yo también estaba muy mal. No sabía qué decirle. Entonces le dije: 'Te agradezco por todas las charlas que tuvimos'. Y ahí me dijo: '¿Qué charla? ¿Usted conmigo? Nunca hablamos'. Después, cuando les conté a los pibes, se morían de risa", comentó el ídolo de River.

Bielsa se mantuvo como DT de la albiceleste, aunque se fue en el 2004 luego de ganar los Juegos Olímpicos. Tres años después llegaría a la selección chilena, volcando la experiencia adquirida y dándole un salto de calidad a un elenco que a la postre ganaría dos Copa América, algo histórico para la Roja.