Aunque mostró sus mejores deseos en su arribo a Colo Colo, Darío Melo tiene mucho camino por recorrer antes de convertirse en una alternativa viable frente a Brayan Cortés, quien se adelanta como titular del Cacique tras la lesión de Agustín Orión.

A sus 25 años, Melo alcanza los 120 partidos oficiales e incluso una veintena de ellos se dio en Copa Libertadores y Copa Sudamericana, entre 2015 y 2017. Sin embargo, su año 2018 fue para el olvido y perdió el puesto ante Sebastián Pérez, hoy arquero de Deportes Iquique.

 

Los registros de la última temporada fueron muy pobres para el ex mundialista juvenil en Turquía 2013. Apenas jugó cuatro partidos y el último fue el 12 de mayo, el empate 1-1 de los árabes como visitantes de Huachipato.

Antes sumó acción contra Universidad de Concepción (1-2), O'Higgins (2-3) y Unión La Calera (1-2); y hay que remontarse al 25 de noviembre de 2017 para encontrar su última victoria, además con la valla invicta, 1-0 sobre Iquique.

En total, sus números de 2018 grafican su bajón. Solo jugó con Germán Cavalieri en la banca, pero sus reemplazantes, el argentino Sebastián Méndez y luego el Huaso Ivo Basay, lo dejaron permanentemente en la banca. Y de eso lleva ya 271 días, casi nueve meses.