Colo Colo se convulsionó completo, cuándo no, antes del partido clave con Unión Española: renunció su gerente deportivo, Marcelo Espina, y empezaron a circular versiones que el siguiente sería Gustavo Quinteros, su entrenador, tras el partido. 

No obstante, Colo Colo venció a los de Ronald Fuentes en Santa Laura y el argentino descartó de plano estas versiones. “Si yo fuera cobarde, me hubiese ido. Yo vine en un momento complicado y estamos más complicados que antes, pero tenemos ganas de seguir luchando y estamos muy motivados”, lanzó en el CDF en el postpartido. 

Empezando su conferencia con el resto de los medios, varios minutos después, se le insistió y salió con todo. “Se hablan muchas estupideces, de Colo Colo se inventan muchas cosas. Hablan demás, hablemos del partido, por favor”, disparó. 

Consultado por la renuncia de Espina, manifestó que “es una baja sentida para mí, para todo el grupo que trabaja el día a día. Fue el que me llamó allá por marzo. Qué lástima que no pude venir en ese momento, hubiera tenido mucho más tiempo para hacer lo que me gustaría hacer y ahora no se puede hacer. Agradecerle eternamente. Más allá de la situación que estamos viviendo, dirigir Colo Colo es un orgullo para cualquier entrenador. Me duele mucho su salida. Si renunció que no sea nada grave. Creo que son cosas internas y lo explicó adentro. Ojalá se pueda ir por la puerta grande como debe ser, dio muchísimos años como jugador también. Un tipo bárbaro y buen profesional”. 

La salida de Matías Fernández y el futuro de Jorge Valdivia
 

Yendo al partido, Quinteros comentó que “no tengo nada para decir de los jugadores, ellos entrenan a muerte desde que llegamos, con mucho esfuerzo, mucha voluntad, entrenan muy bien. Cuando entramos a los partidos no podemos plasmar en cancha lo que se entrena, por un montón de motivos que ya dije muchas veces. No podemos plasmar la idea de juego o jugar todos los partidos bien porque tengo que cambiar jugadores todos los partidos. El fútbol no es tan fácil, cuando no juegan los mismos por los mismos sectores se hace difícil jugar bien y ganar. Y mucho más difícil cuando tienes un montón de problemas físicos. Tenemos 10 jugadores fuera, incluido Insaurralde por contacto estrecho”. 

“Las lesiones también se dan por estrés, de un montón de cosas que están sucediendo, estar abajo en la tabla. Pero la actitud del equipo está siempre. Hoy a lo mejor no nos hicieron el gol primero y no nos equivocamos. Si nos marcan primero, inconscientemente dejamos de hacer lo que debemos. Creo que jugamos bien por momentos y cuando nos marcaron, no jugamos bien, no pudimos aprovechar el jugador demás. Además inventamos posiciones, jugamos con el chico Jeyson Rojas de lateral siendo que es un buen marcador central. Pero estoy contento, porque este partido era muy importante, ante un rival que ataca todo el tiempo y que es peligroso”, abundó. 


 

Sobre la salida de Matías Fernández, explicó que “jugó bien Matías, es un jugador distinto, mantiene la posesión. Está bien para jugar 45, 50 o 60 minutos al cien por cien. Tomé la decisión porque le sacaron una amarilla y queríamos mantener la diferencia de un jugador. Como no es su fuerte la marca, hoy le dimos una función complicada que fue tapar a Mario Sandoval cuando no teníamos la pelota. Lo hizo muy bien, siempre lo intentó, lo ofensivo y lo defensivo. Sandoval no tuvo espacios, siempre estuvo Matías cerca y lo exigió cuando tuvo la pelota. Pensé que con la subida constante de los laterales del rival íbamos a tener muchas opciones con el interior y el extremo, pero no pudimos aprovechar eso. Cuando se da una adversidad, no podemos jugar como queremos. Creo que al final no fue un cambio que benefició futbolísticamente al equipo, quizás tapamos a los laterales pero no tuvimos el fútbol que queríamos”.

¿Y el Mago? “Ojalá Jorge (Valdivia) pueda estar ante Universidad Católica. Todos confiamos en él. Los compañeros confían mucho en él. Más allá de sus condiciones y su calidad, nos puede aportar un montón de cosas, libera de presión a otros compañeros en ese trabajo de meter el último pase. Matías lo hizo bien, por momentos le cuesta todavía en el ritmo. Hoy fue intenso, el rival presionó mucho, no daba muchos espacios, no teníamos lugar para jugar, ellos se multiplicaron con un jugador menos. Esperamos que esté para algunos minutos”, avisó. 

Finalmente, Quinteros reflexionó que “ahora estamos más tranquilos, el plan de juego de hoy fue bueno, hicimos el gol así, retrocedimos en el campo, dejamos salir al rival, estudiamos que el rival deja espacios cuando tienen pérdida de balón. Ahí recuperamos, hubo diagonal de Parraguez y fue fundamental. Las otras dos o tres situaciones que tuvimos fueron así. Por eso nos vamos tranquilos. Variamos el plan de juego por un montón de motivos tácticos, físicos, de características de jugadores y nos salió bien. Vamos a intentar jugar de una manera parecida. Me parece que Católica es el mejor equipo del país en el juego, por eso va arriba y pasa en Copa Sudamericana. Será una final más para afrontar”.