La final de la Champions League entre Real Madrid y Liverpool en el Stade de France de Saint-Denis se vio retrasada en 15 minutos debido a problemas e incidentes en el ingreso del escenario escogido para París 2021-22.

Durante la previa se conocieron informaciones de múltiples problemas de los hinchas con las entradas, el traslado desde Inglaterra y España, incluidos engaños de tipo con entradas falsas y estafas relacionadas a los boletos.

El colapso en los ingresos al Stade de France se vio acrecentado con el cierre de las puertas de acceso por donde ingresaban fanáticos del Liverpool, generando un bochorno para la organización y la UEFA.

Ante la incertidumbre y desorden, hinchas del Liverpool comenzaron a saltarse las vallas y rejas del perímetro del Stade de France.

Otros en grupo lisa y llanamente empezaron a empujar en grupo lo que tuvieran por delante en su afán de ingresar al sector de las tribunas mientras el personal de seguridad intentaba detener a los que podían.

Cabe considerar que este tipo de avalanchas o reventones supone no sólo un riesgo para quienes los protagonizan, sino que también atenta contra la seguridad del resto de los presentes en hechos que en el pasado ya han costado la vida de muchas personas otros espectáculos.

El descontrol se toma la previa de la final de la Champions League, que así como va demorará más de 15 minutos de su horario original para comenzar. Una postal vista y condenada con recurrencia en el fútbol chileno y que este sábado acaecieron en Europa, donde se supone que estas cosas no pasan.