Universidad de Chile está mentalizada en el último partido de la primera rueda del Campeonato Nacional, donde visita este sábado a Ñublense en el estadio Nelson Oyarzún, en Chillán, aunque todavía no ha logrado dar vuelta la página por los polémicos cobros de los árbitros.

Ante Coquimbo Unido el apuntado fue Juan Lara, quien expulsó a Lucas Assadi por reclamos desde la banca de suplentes, en el estadio Francisco Sánchez Rumoroso.

Y ahora, el lunes, ante Cobresal, el apuntado fue Manuel Vergara, quien le mostró tarjeta roja a Darío Osorio y Mauricio Pellegrino, con varias jugadas para las polémicas donde todavía quedan dudas de algunos cobros.

Por lo mismo, el plantel, si bien no han querido profundizar, si dejan sobre la mesa la sensación de los últimos dos partidos, donde se sienten pasados a llevar por los cobros de los árbitros.

“Siento que quizás, estos últimos partidos, nos hemos sentido un poco perjudicados, pero tiene que ver con acciones específicas del juego no en el global, pero en general no”, comenzó explicando el lateral Juan Pablo Gómez.

El ex Curicó Unido también entrega detalles de las últimas expulsiones de sus compañeros, donde estuvo cerca de las jugadas, que encuentra que fueron exageradas de parte de los hombres de negro.

“Un poco tiene que ver con lo que dije, nos hemos sentido perjudicados en las últimas dos fechas. Lo mismo pasó con Lucas (Assadi), estaba cerca, no sentí que se le pasara la mano. Fueron estrictos con él. Esperamos que ojalá no vuelva a ocurrir, porque tenemos buen comportamiento”, precisó Gómez en conferencia de prensa.