Ben Brereton quedó fuera de la nómina de Ricardo Gareca. El británico-chileno no estará en los duelos de Chile ante Albania y Francia, a jugarse en la fecha FIFA de marzo.
¿La razón? Una de ellas, al menos, es la distancia idiomática de Ben. Ricardo Gareca fue claro: “Me encantaría que aprenda español. Sería importante”. Brereton tendrá que decir algo más que “hola” y “buenos días” la próxima vez que venga a la Roja.
La pregunta seria es: ¿es el idioma un factor realmente importante en un deporte que tiene equipos con jugadores de distintos horizontes? Arturo Vidal, por ejemplo, no parece tener un muy buen alemán y, aún así, la rompió en Bayern Munich.
Para el Tigre, sin embargo, es trascendental. No solamente por la comunicación en el campo de juego, sino que también por la comunicación con la prensa y un buen ambiente en el camarín.
Un antecedente del Tigre
Sin embargo, esta no es la primera vez que Ricardo Gareca manda a un jugador a aprender español. En su estadía en la selección peruana, también hizo lo mismo y lo puso como una condición para vestir la blanquirroja.
Nos referimos al caso del italo-peruano Gianluca Lapadula. El jugador del Cagliari había rechazado el llamado del Tigre en 2016, pero en 2020 se retractó y comenzó los trámites para jugar por la selección de Perú.
Gareca llegó a Italia para el cumpleaños de Lapadula (7 de febrero) con el fin de convencerlo de sumarse a la selección incaica. Le puso una única condición para pasar a ser seleccionado: aprender español. Es por eso que tras decidirse Lapa tomó de inmediato clases junto con su señora.
“Lo conocí como un padre, lo viví como un entrenador, pero sobre todo fue un amigo”, señaló Lapadula luego de conocerse la salida del Tigre de la selección peruana. Esa cercanía generada con el italo-peruano bien podría repetirse con Ben10. Habrá que esperar a próximas citaciones.